Capítulo 49

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-Que les vaya bien -Gritó Natasha despidiéndose del camión.

-¡Adiós mami! -Natalie se asomó por la ventana.

-¡Cuida a mi hija Rogers! -Natasha le gritó al rubio.

-¡No te preocupes! ¡Te amo! -Gritó.

El camión desapareció de la vista de todos los presentes que estaban despidiendo a sus hijos. Natasha tenía una sonrisa de boba en la cara.

Negó riendo. Sacó las llaves de su auto, caminó a él, se subió y condució hasta la empresa. Al llegar subió hasta su oficina donde sus amigos ya se encontraban buscando pistas que los llevaran hacia Guillermo y el asesino.

-Encontramos algo -Tony habló.

-¿Qué es? -Natasha dejó sus cosas a un lado.

-El padre de Rumlow fue militar -Le extendió unos papeles -Francotirador para ser más exactos. El ejército lo destituyó por arreglos que hacía con traficantes alemanes y soviéticos.

-Un traidor -Natasha susurró.

-Así es -Tony asintió -Cuando descubrieron pruebas contra él, escapó de todo y dejó a su hijo con su madre -Hizo una pausa -Pero, la madre de Brock siempre tuvo un depósito cada mes en su cuenta, siempre por la misma cantidad, pero no pudimos rastrear de donde venía.

-No creo que sea tan difícil averiguarlo -Natasha tomó asiento -En el instituto siempre escuchaba que Brock salía de vacaciones al mismo lugar. ¿Saben dónde?.

-Creo que sí -Clint rebuscó en unos papeles -A las afueras de Washington. Una cabaña de tiro.

-Ahí le enseñó tiro su padre -Natasha dijo convencida.

-El problema es -Wanda volteó la laptop -Su padre murió hace cuatro años.

-Entonces él no puedo ser quien mató a tu tía -Tony hizo una mueca.

-No fue él -Natasha suspiró -Fue Brock.

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-Debemos encontrar cómo llegar a ellos -Tony dió un sorbo a su café.

-No sabemos cómo -Wanda se recargó en la ventana.

-Esto es muy estresante -Natasha hizo una mueca -Aleja eso de mí -Arrimó la ensalada -El aderezo huele espantoso.

-No huele a nada -Wanda tomó un poco -Anda, come, sabe rico.

-No, no -Alejó su mano -Me harás vomitar.

-Estás muy rara -Clint la miró -Ese aderezo te encanta.

-Pues hoy no es mi favorito -Natasha hizo una mueca.

-Volvamos a lo que estábamos -Tony arrugó una servilleta.

-¿Cómo los encontramos? -Natasha preguntó.

Todos se miraron entre ellos cuando vieron varias camionetas negras estacionarse frente al restaurante en donde estaban. La gente no se hizo esperar y comenzó a acercarse a ellas. Los chicos decidieron ponerse de pie y ver qué sucedía, pero un pitido de alerta comenzó a sonar. Natasha sacó de su bolso el aparato que Tony le había dado y éste estaba parpadeando en luz roja.

Tony entendió de inmediato lo que eso significaba.

-¡Todos al suelo! -Gritó cuando vió a dos tipos con metralletas.

Las balas inundaron las calles y el restaurante. Vidrios salían volando encima de ellos y los gritos no se hicieron esperar. Natasha llamó a sus guardias pero ellos tardarían en llegar al menos unos diez minutos.

Los disparos se detuvieron y los chicos alzaron su cabeza.

-Hay que salir de aquí -Clint los miró.

Todos asintieron, se levantaron y salieron corriendo del local lo más rápido que pudieron. El aparato seguía pitando y Natasha comenzó a inundarse de miedo. Volteó a todas partes y no había nadie, pero el aparato seguía haciendo lo suyo.

Doblaron en una esquina y disparos a lo lejos comenzaron a escucharse, pero sólo daban al pavimento. Todos se detuvieron y comenzaron a rodearlos otro tipo de vehículos. Salieron cuatro hombres fornidos vestidos de traje, uno de ellos abrió la puerta de uno de los autos y de él salió Guillermo.

-Escuché que estabas buscándome -Se dirigió a su sobrina.

-Valiente forma de hacer tu entrada -Natasha le dijo burlona.

-Que bueno que te gustara -Se acomodó la corbata -Quería impresionarte.

-Era sarcasmo imbécil -Natasha rodó los ojos.

-Lo sé -Dió un paso hacia adelante -Eres como tu madre.

Guillermo miró a los tipos y con solo una mirada ellos comenzaron a agarrar a sus amigos. Tony y Clint estaban siendo golpeados mientras Wanda estaba siendo apuntada con un arma. Natasha quiso acercarse pero le detuvieron el paso.

-Más vale que vengas con nosotros -Guillermo le advirtió -Sino, ellos pagarán las conseciencias.

Natasha se sentía impotente al ver sus amigos siendo brutalmente golpeados. Todo era su culpa, ella no debió involucrarlos tanto, no debió jalarlos con ella.

-¡No Tasha! -Clint la miró sabiendo lo que haría. Lo golpearon en el estómago.

-Iré -Natasha vió al ruso -Pero déjalos vivos.

-De verdad te volviste tan sentimental -Rió -Patético -Le dió una bofetada.

-No vuelvas a tocarme -Natasha le advirtió.

-Hago lo que quiero -La tomó del brazo -Porque tengo tus puntos débiles -Le susurró -Obedece o tus amigos pagan.

Natasha lo miró queriendo golpearlo, pero sólo negó y suspiró. Miró a sus amigos y susurró un lo siento. Subió al vehículo y segundos después ninguno estaba.

Wanda corrió hacia sus amigos y los ayudó a levantarse. Los dos estaban brutalmente golpeados y con sangre en algunas partes. Wanda estaba llorando desconsoladamente.

-Se la llevaron -Formuló la castaña.

-Vamos a encontrarla -Tony se sostuvo de la pared.

-Hay que llamar a Steve -Clint murmuró -Hay que llamar a todos.

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-Lindo lugar -Dijo sarcásticamente la rusa.

-No creías que te llevaría a un hotel de cinco estrellas -Se quitó el saco -Debíamos encontrar un lugar donde nadie pudiera encontrarte.

Dos hombres salieron de las esquinas y sostuvieron a la rusa por los brazos. Intentó safarse pero se sentía pesada y cansada. La sentaron en una silla a la cual la amarraron.

-¿Vas a torturarme? -Preguntó riendo.

-Adivinaste -Dijo arrodillándose frente a ella -Pero primero quiero ver algo, más bien, comprobarlo.

Le pinchó el dedo con una aguja y comenzó a recolectar la sangre que salía. Pasó un poco de alcohol por el agujero y todo estaba listo.

-Ya saben que hacer -Le dió el pequeño frasco a uno de los matones.

-¿Qué se supone que va a demostrarte mi sangre? -Preguntó Natasha mirándolo.

-Algo que me divertirá mucho saber -Arrimó un carrito hacia ella.

-Lindos juguetes -Dijo la rusa.

-Gracias -Se arremangó la camiseta -Pero no son para ti, no todos.

-Espero que te guste ser golpeado -Lo miró -Porque eso haré contigo y con todos tus matones cuando salga de aquí.

-Si es que sales -Volteó a verla.

Natasha sintió eriza su piel.

-Comencemos.

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Mi nueva vida (Romanogers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora