Mi nueva vida (Romanogers)

Capítulo 28

-¿Por qué tanta urgencia en vernos? -Clint preguntó entrando a la habitación de la rusa.

-El arquero tiene razón, ¿por qué? -Tony se sentó.

-Necesito decirles algo -Natasha se acomodó en la cama -Pero quiero que lo tomen bien.

-Asustas cuando dices eso -Clint arrugó la frente.

-Sólo escuchen -Natasha los vió -Ustedes dos son demasiado importantes para mí. Son como mis hermanos, estoy más unida a ustedes que a los demás. Me he sentido mal últimamente -Miró a Tony -Vómitos y mareos. Ayer discutí con mi tía -Clint abrió los ojos -Una cosa llegó a la otra y me alteré tanto que me desmayé.

-¡¿Qué?! -Clint se alteró -¡¿Por qué no me dijiste?!.

-Calma y escucha Barton -Natasha lo fulminó con la mirada -Me llevaron al hospital y me hicieron unas pruebas de sangre para descartar cualquier cosa -Natasha comenzó a jugar con sus manos -Estoy embarazada -Soltó de repente.

Natasha los miró y los dos estaban en shock y con el ceño fruncido.

-Voy a matarlo -Clint formuló.

-¿Cómo te sientes Natasha? -Tony le preguntó.

-Asustada -Se sinceró -No me esperaba algo así, al menos no dentro de los próximos seis o siete años.

-¿Lo vas a tener? -Clint la miró.

-Sí -Contestó -Mi tía me apoya y voy a salir adelante. Terminaré mi carrera, tendré al bebé y lo sacaré adelante.

-Supongo que no le dirás a Rogers.

-No Clint -Hizo una pusa -Le diré, claro que sí. El hecho de que tengamos muchas diferencias y ya no queramos estar uno con el otro no significa que dejaré a mi bebé sin padre.

-¿Cuándo le dirás? -Tony volvió a hablar.

-En una semana -Respondió -Necesito procesar muchas cosas. Pero necesito que tú -Señaló a Tony -Le hables y le digas que quieres verlo en el café de siempre a las dos de la tarde. Yo iré en vez de ti.

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-¿Estás segura de esto? -Clint le preguntó a Natasha.

-Tengo que hacerlo -Ella tomó su bolso -No quiero tardarme.

-Aquí te espero.

Había pasado la semana que la rusa había acordado con sus amigos. Era el día en que tenía que decirle a Steve que estaba embarazada y que quería que formara parte de la vida del bebé. Sus amigos ya estaban enterados de lo sucedido excepto Barnes, pues al ser el mejor amigo del rubio podría haberle dicho todo.

Entró al café y se sentó en una mesa que estaba casi al final, con una ventana que daba hacia una vía de tren. Soltó un suspiro y se molestó. Ese no era el café acordado, claro que no, pero Steve Rogers siempre debía hacer su santa voluntad.

Escuchó la puerta del negocio abrirse y entró Steve. Era lógico que estuviera buscando a Tony, pues su cara mostraba confusión.

-¡Hey! -La rusa gritó.

Steve volteó y la vió. Natasha le hizo un gesto para que se acercara. Caminó hacia la mesa y se sentó.

-Pensé que sería Tony -Respondió seco.

-Lamento decepcionarte -Natasha se quitó sus gafas -Necesito hablar contigo.

-Yo no -Contestó.

-Pues yo sí y no me importa si quieres o no -Natasha lo miró fría -Lo que te voy a decir te incluyé, será tu decisión el querer o no.

-¿Qué es lo que me puede incluir? -Steve estaba desesperado y nervioso.

-Te lo diré así -Natasha sacó un sobre de su bolso -Estoy embarazada. Tú eres el padre.

Steve se quedó inmóvil sin saber que decir al respecto. Pero una vocecilla lo sacó de sus pensamientos.

-No creo que sea mío -Steve la miró duro -Siempre estás con muchos de los chicos, no sabemos qué haces.

-¿Qué dijiste? -Natasha formuló dolida.

-Es la verdad Romanoff -Steve sonrió malicioso -Pero si ese niño suele ser mío -Hizo una pausa -No quiero saber nada de él.

Natasha tenía ganas de llorar, pero no lo hizo. Endureció la mirada.

-Bien -Dijo sonriendo -Eso es todo. Me voy.

-¡Alto! -Steve la tomo del brazo -¿Cómo sabes qué te dejaré en paz?.

-¿Qué quieres decir? -Natasha se soltó de su agarre.

-Puedo volver en cualquier momento y quitarte al niño -Natasha lo examinó -Hagamos un trato.

-¿Qué quieres? -Natasha volvió a sentarse.

-Dinero -Steve dijo.

-No puedo creerlo -Natasha negó -Todo este tiempo pensando que no eras interesado, que me querías a mí por lo que soy y no por lo que tengo. Sacaste las garras Rogers.

Steve no pudo evitar sentir  un apretón en el pecho al escuchar decir eso a Natasha.

-¿Cuánto quieres? -Natasha soltó enojada.

-Quince millones -Soltó Steve.

-¡¿Qué?! -Natasha abrió los ojos -Dios, si quieres un maldito interesado.

Natasha se sentía mal, muy mal. Ver a Steve actuar de esa forma le rompía más el corazón.

-Bien -Natasha formuló -Quince millones -Sacó su chequera -Pero -Lo miró -Te irás de nuestras vidas, incluyendo de la ciudad.

-De acuerdo -Steve logró formular.

-Escribe aquí que aceptas irte y no buscarnos al bebé y a mí -Le dió un pedazo de papel -Después firma y lárgate.

Steve tomó una pluma y comenzó a escribir lo que Natasha le dijo.

-Blanca soy yo -Natasha estaba en una llamada -Acabo de hacer un cheque de quince millones a nombre de Steve Rogers. Quiero que se los des sin ninguna excusa. Dale números de serie que no sean rastreados.

Natasha colgó y miró a Steve -Firma -Le ordenó -Si no quieres hacerlo, no lo hagas -Natasha intentó convencerlo -Podemos arreglar esto.

-No hay nada que arreglar -Steve firmó -Toma.

-Ten -Le dió el cheque. Pasó un tren -Largo de la ciudad.

Natasha se puso las gafas y se levantó de la silla, salió del lugar y respiró hondo.

-Esto es un adiós. No volveré a enamorarme.

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Lamento esto, pero es parte de la trama amigos. Espero les guste.