Seré Un Buen Padre, Lo Prometo

Capitulo 49

Pasó una semana de la fiesta y hoy sería el día en que Jin tenía que ir a la empresa para arreglar algunas cosas para ver si tendría un comeback después de qué el bebé naciera. Él quería grabar la canción y el vídeo para la fans pero lo malo era que no podría ir con los chicos a promocionar.

"¿A qué hora regresarás?" Pregunté dándole su chaqueta.

Él la tomó y se la puso.

"Trataré de venir lo más temprano que pueda," dijo.

Asentí con la cabeza.

"¿A qué hora Jimin traerá a Mina?" Él preguntó.

"Dijo qué la llevaría a desayunar y después a comprarle ropa y juguetes," explique.

"Entonces llegará tarde a la reunión," Jin dijo pensativo.

Alcé los hombros.

"Tal vez aviso. Quiero que descanses y no hagas nada," dijo Jin.

"Tengo qué hacer la comida," dije.

"Yo la haré cuando regrese," dijo.

No tuve otra opción más que aceptar.

"No le causes problemas a tu mami," dijo acariciando mi panza y después la beso.

"Te amo," dijo.

"Te amo también," dije.

Él beso mi frente y después salió de la casa.

•••••

Había pasó una hora desde que Jin se había ido y sentía que habían pasado mil horas.

"¿Que hago?" Me pregunte a mi mismo mientras miraba por toda la casa.

Se que Jin me dijo que no hiciera esfuerzos pero ya me canse de estar en cama todos los días. Quiero salir y hacer cosas como antes.

Me levanté del sillón y me dirigí a la cocina.

Casi no podía moverme por la gran panza que tenía.

Tomó en vaso de agua y después me dirigí a la sala pero de la nada sentía un gran dolor en mi abdomen. Tomé un poco de aire para ver si el dolor desaparecía pero fue inútil ya que los dolores eran cada vez más fuerte. Solté el vaso y cayó al suelo. Sentía que me faltaba el aire. Tomé mi teléfono del sillón y llamé a Jin pero su teléfono estaba apagado. No sabía que hacer los dolores eran insoportables. Llame a Jin de nuevo pero no contestaba. No sabía a quién más llamar no podía ni pensar ya que los dolores eran muy fuertes.

"Jin contesta," dije llorando con el teléfono en mis manos tratando de llamarle.

Sentía algo húmedo en mis pantalones. Toqué mis pantalones y mire mis manos manchadas de sangre. El pánico entró en mi. Tenía tanto miedo. Mire el suelo y había un choro de sangre que provenían de mis piernas. Caí al suelo ya que me sentía débil. De la nada mis ojos se cerraron y todo se volvió negro. Lo único que podía escuchar era el timbre de la puerta y la voz de Jimin.

"Jimin," susurré y después dejé de escuchar la voz y el timbre de la puerta.