Número de contacto.

697 100 30
                                    

—¿Irás donde Baek?


ChanYeol tomó el bolso donde traía su cámara y se lo colgó al hombro, dándose media vuelta para ver a KyungSoo. El bajito estaba mirándole, teniendo ambos brazos cruzados sobre su pecho y una expresión llena de curiosidad en su rostro. 


—Sí. Dijo que quería conversar conmigo...


—¿Quieres que te lleve?


KyungSoo arqueó una de sus cejas, alzando su mano para hacer girar un juego de llaves en su dedo índice. Era cómico el verlo con esa parada de rudeza cuando estaba vestido con una camiseta rosa pálido, y además unas pecas maquilladas en sus pómulos y el puente de su nariz ya que él había sido el modelo aquella tarde. 

ChanYeol soltó una pequeña risa, algo en esa imagen tan cómica le causó ternura; tardó un poco en asentir. 



...



El auto se detuvo y ChanYeol parpadeó rápido cuando se percató de la gran cantidad de personas que habían en la playa. Eso era extraño.


—Oh. Hay muchas personas...


Y en realidad, no, no estaba feliz con eso.

Frunció el puente de su nariz, notando como KyungSoo se apoyaba en su hombro, también mirando hacia la playa. Cuando ChanYeol le miró, se encontró con que el bajo tenía el ceño fruncido. Inmediatamente soltó una risa.


—Detesto a las personas. Pasado mañana es la competencia de Surf y vienen muchos turistas a ver, después de eso viene la fiesta de verano y toda esta locura dura aproximadamente una semana.


KyungSoo suspiró y ChanYeol volvió a mirar a toda esa gente en la playa, si no mal recordaba, cierta persona venía en esta época a pasar unos días y... Sólo esperaba no encontrarse con dicho ser humano.

Se golpeó mentalmente por pensar en esa estupidez.


—En fin. ¿Sabes dónde queda la tienda de BaekHyun?


Oh. Cierto.

ChanYeol negó, escuchando la risa de KyungSoo.


—Lo imaginé. Es esa especie de... ¿Cabaña? Que está al lado del bar de los chicos. Suerte, y me cuentas.


El dedo de KyungSoo se mantuvo señalando la tienda de BaekHyun en todo momento. ¿Cómo no lo había sospechado? ChanYeol se removió y abrió la puerta del auto, sacando primero sus piernas para no ser demasiado brusco al cortar el contacto físico con su amigo. Inmediatamente la agradable brisa marina le golpeó el rostro.


—Sí. Sí. En la noche hablamos, mamá KyungSoo.


ChanYeol dejó la puerta abierta, apoyando uno de sus brazos en el techo del auto una vez que se bajó, inclinando el cuerpo hacia el frente para mirar con cierta burla a su amigo que rodó los ojos y soltó un bufido. ChanYeol sabía que KyungSoo fingía esas expresiones de molestia.

Paraíso.  [KaiYeol / ChanKai]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora