Capítulo 1: Los días transcurridos.
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✦Narrador omnisciente
Él ojiazul tomó sus maletas mientras bajaba al fin del vuelo que lo tenía agotado. El aire frío enseguida chocó contra su cálida piel que cubrió con la chaqueta que tenía en sus manos.
Prosiguió su camino y luego de unos papeleos con empleados del aeropuerto que le desearon un amable "Bienvenido a San Diego", al fin caminó bajando las escaleras, esperando ver a su mejor amigo.
Kellin Quinn.
Un... Simple chico.
Trabajaba repartiendo pizza, era un don nadie que no llamaba la atención de muchos. Pero no pudo negarse cuando su mejor amigo le pidió que se mudara con él a San Diego.
Vic Fuentes era muy persuasivo y convenció a Kellin fácilmente. Y no era como si a Kellin le molestara ir a vivir con él, en realidad, a Kellin ya no le importaba la mayoría de sus cosas al entorno, no después de estar solo y abandonado tantos años.
Llega un punto en el cual ya no te importa estar solo, simplemente... Te acostumbras a ello. La soledad es peligrosa porque es adictiva, una vez descubres cuanta paz hay en ella, menos quieres lidiar con la gente idiota.
A diferencia de Vic, Kellin era más reservado y tímido, de hecho, no sabía cómo Vic y él podían llevarse tan bien, ya que eran como agua y aceite.
Últimamente Kellin pensaba mucho en el suicidio. Pero le había prometido a Vic no volver a intentarlo, ni mucho menos volver a drogarse. Pero encerrado tras 4 paredes no es tan difícil sentirse solo e incluso sentir que no vales en no absoluto, tengas el tiempo que tengas, nunca dejaras de ser lo que fuiste y nada cambiará el pasado, ahí está, por eso se llama pasado.
Vic había sido el único soporte para Kellin durante muchos años. Kellin era muy inseguro. Se sentía inútil. Y la única manera de sentirse mejor era automedicandose. La gente que él creyó sus amigos, poco a poco se fueron alejando de él. Había sido bastante jodido perderlos uno por uno, tan sólo se odiaba y se maldecía mientras lloraba por las noches pensando en lo mucho que se odiaba.
Vic, más que nadie, conoce la historia de Kellin, conoce cada detalle de él, conoce sus demonios e incluso puede estar seguro de saber qué es lo que pasa por la mente de Kellin. Obviamente Vic no podía estar ahí siempre para cuidarlo a la distancia, ya que vivían lejos y ambos trabajaban, por eso le pidió a Kellin que, cada que tuviera un ataque de lo que sea, en vez de tomar una jeringa y una dosis, tomara un lápiz y escribiera.
Y eso para Kellin era un hábito ahora. La mayor parte de su tiempo escribía. Escribía canciones que jamás nadie escucharía. Escribía cosas que jamás nadie leería.
Kellin cada día que pasaba se olvidaba de todo cuando hablaba con Vic, era la mejor adicción que tenía, porque sólo estando con él podía sonreír sin necesidad de ninguna droga. Y por eso decidió irse a vivir con él.
Esta es la historia del hombre que lo tenía todo... Y del chico que no tenía nada.
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Enredados (Kellic)
FanfictionEsta es la historia del hombre que lo tenía todo... Y del chico que no tenía nada.