*****: ¿Y ustedes dónde estaban?- preguntó una voz claramente molesta, delante de nosotros.
Allí, parado con los brazos en jarra, estaba mi queridito hermanastro, mirandonos seriamete. ¿Y a este que bicho le picó?
Zayn: Fuimos al parque- respondió algo nervioso. Y si, para no estarlo, con la miradita de Harry. Me da gracia, parece que mi nuevo hermanastro es un cuida. Lola, porque le va a ir mal si se pone en ese plan.
Tu: ¿Que tu no tienes nada más interesante que hacer?- le dije con tono de: no jodas Harry.
Harry: La verdad, no. No hay nadie en casa, estaba por irme a la de papá a buscarte. Pero aquí estás... con Zayn- esto último lo dijo con tono... despectivo. O tal vez sea mi imaginación.
Tu: Si, fuimos a tomar un helado- respondí como si fuera la cosa más natural del mundo.
Harry: ¿Y por qué no me avisaron?- exigió saber con voz ofendida. Ah, caradura. Ahora me viene a decir que no le dije nada. Si, como si yo fuera a ir a la habitación de Harry a interrumpir lo que sea que estuviera haciéndo con esa zorra para invitarlo al parque. Pelotudo.
Tu: ¿Quizás porque tu estabas muy ocupado con la zorra esa?- respondí lo obvio; me miró mal.
Harry: No le digas zorra, se llama Talía.- Encima, la defiende. Por favor.
Tu: Como sea- respondí cansada, me chupa un huevo como se llama- ¿y los demás?- pregunté como para cambiar de tema.
Harry: Louis con Eleonor, Liam haciéndo mandados- todo eso ya lo sabía- y Niall se fue a su casa porque nos quedamos sin comida.- reí por esto último. Y si, Niall es Niall; todavia no entiendo como es que no engorda, les juro. Con todo lo que come por día tendría que ir al gimnasio mínimo 4 veces a la semana. Y es un palo, que envidia jajaj.
Tu: No entiendo como no engorda- los chicos rieron conmigo.
Harry: Yo tampoco- sonó un celular; Zayn sacó el suyo y comenzó a teclear en él.
Zayn: Chicos, me tengo que ir- anunció. No pude evitar pensar: ¿ya se tiene que ir?
Saludó a Harry con una palmada en el hombro y se dirigió hacia mí.
Zayn: La pasé muy bien hoy, que se repita- me guiñó un ojo. La puta madre, que partible que es. Ok, me controlo.
Tu:- sonreí como una estúpida- Lo mismo digo, chau Zayn- me dió un beso tierno en la mejilla y salió por la puerta.
Me volví hacia Harry, que me miraba curioso.
Tu: ¿Qué pasa?- pregunté ante tanta miradita. Sacudió la cabeza y me sonrió.
Harry: Nada. Oye, ¿vamos a comer algo a tu casa? Me muero de hambre.
Tu: Vamos- me giré hacia la puerta y salí- pero cocinas tú- le advertí.
Harry: Okey, pero tu me ayudas.
Tu: Claro que no- rió, y caminamos hasta casa, ya que ir en auto era algo tonto.
Ya en la cocina, veía como Harry abría y cerrba los cajones, buscando algo. Así, con un delantal rojo con puntilla blanca puesto, y cara de concentración, se veía extremadamente gracioso.
Harry: Oye, ¿de qué te ries?
Tu: De ti- repondí sincera, sin poder contener mi risa. De pronto, se acercó peligrosamente a mi (yo estaba apoyada en la mesada, de espaldas a ella) dejando su rostro a centímetros del mío. Dejé de reirme, nerviosa por su proximidad. Me pregunto cuándo va a dejar de hacer eso, hacercárse a mí de repente. Me pone nerviosa. Supongo que lo hace por eso mismo. Maldito.
