Me desperté con unos leves cosquilleos en mi mejilla, producto de los suaves dedos de alguien. Abrí los ojos pesadamente, encontrándome con la brillante mirada verdosa de Harry, muy cerca de mí.
Por un momento me encontré desorientada, preguntándome qué mierda hacía Harry en mi casa, en mi cuarto, y, lo más importante, en mi cama. Hasta que bueno, la memoria volvió a mí y no tardé en recordar lo que pasó ayer de noche.
Harry… tuve sexo con Harry. Mi primera vez fue con él.
Harry: Hola princesa- murmuró con voz ronca, mirándome con su cabeza apoyada en un codo, recostado a mi lado – ¿ya era hora de que despertaras, no?- dijo con diversión en los ojos.
Tu: ¿Qué hora es?- pregunté desperezándome, y colocándome en la misma posición que él, por lo que quedábamos enfrentados.
Harry: Am- miró el reloj en su muñeca- la una y media.
Tu: ¿Qué? ¿Por qué no me despertaste?- pregunté alarmada; está bien que ame dormir, pero tampoco la pavada. Después no voy a poder dormirme por la noche.
Harry: Es que te veías tan linda durmiendo que me daba cosa- dijo sencillamente, mirándome con ojos tiernos.
Tu: -no pude evitar sonreír- ¿hace cuánto que llevas ahí mirándome?
Harry: Lo suficiente como para saber que eres hermosa hasta cuándo duermes- me sonrojé, pensando en que Harry me hubiera observado un rato largo, sin darme cuenta. Y al mismo tiempo, su dulzura me mató.
Tu: Amo tu lado tierno ¿sabes?- no pude con el impulso, y eliminé los pocos centímetros que nos separaban, quedando solo a milímetros de distancia- me dan muchas ganas de besarte.
Harry: ¿Y por qué no lo haces?- se limitó a decir, con la ansiedad reflejada en sus ojos. Sonreí levemente, uniendo nuestras bocas en un pequeño beso.
Antes de que pudiera profundizarlo, el celular de Harry sonó.
Harry: Mierda- se quejó contra mis labios.
Tu: -reí levemente- contesta, puede ser importante.
Harry: ¿La típica frase, eh? Que poca imaginación, ______(tu apellido)- murmuró juguetón con su aliento chocando en mi mejilla, provocando que mi piel se erizara. Mientras, el teléfono seguía sonando.
Tu: ¿Quieres algo más original? Pues tie…- quién estaba llamando cortó, porque volvía a haber silencio- podría haber sido importante- lo reté, llevando una de mis manos hasta sus rulos y comenzándolos a acariciar. Cuándo digo que amo su pelo, es la más pura verdad. Es tan perfecto.
Harry: Si es importante, volverán a llamar- y cómo si el que estaba del otro lado de la línea hubiera escuchado sus pensamientos, el estúpido celular de Harry comenzó a sonar nuevamente.
Tu:-no pude evitar reír- ahí tenés, atendé y no seas vago- dije graciosa, quitando mi mano de su pelo para que se levantara. Puso mala cara, pero salió completamente desnudo de la cama y, tras tomar el celular de su vaquero, que estaba tirado por ahí, volvió.
Ah, olvidaba decirles; el culo de Harry es tan genial.
Harry: -me dedicó una sonrisita pícara, antes de atender- ¿Hola?...ah, hola Vicky ¿cómo están?...¿eh? ¿ahora?...- me tensé al notar como sus ojos adoptaban un matiz de alarma- no, no. Claro… si, recién se despertó- me echó una rápida ojeada, nervioso. ¿Harry nervioso? No es normal, algo pasa- Bueno, los esperamos… -¿qué? ¿ya vienen?- no, ahora íbamos a hacerlo ahora ¿ustedes?... ah, bueno, entonces los esperamos… De acuerdo, nos vemos, bye- y cortó.
