Incondicional | Camren Fanfic

Capítulo 31

En los últimos días que dieron paso a un par de semanas, el amanecer había iluminado el horizonte cada mañana hasta que horas después el atardecer conseguía oscurecer aquella parte del planeta. Mientras, tanto la chica de penetrantes ojos verdes como la de profundos marrones, habían encontrado el hueco necesario para volverse a ver después de aquella noche de placer.

La situación se había vuelto más intensa entre ambas, a pesar de que la mayor de ellas fuera consciente de que aun había una parte de su historia que faltaba por sacar a la luz. Sin embargo, tras una conversación con Shannon debatió sus argumentos y aseguró que no solo ponía en riesgo su relación con la latina, sino también la de ésta con la familia Guerrero.

Por eso mismo, dejó que siguiera fluyendo todo con naturalidad y, aunque no pudiera soltar el teléfono móvil de su mano a causa de los múltiples mensajes, era consciente de que sus exámenes finales junto el trabajo de fin de grado estaban cerca y junto a ellos, el Campeonato Estatal de Softball.

En los últimos días un observador se había presentado en los entrenamientos y en los dos partidos que salieron victoriosos para las Águilas, consiguiendo así que éste se acercase a hablar con dos personas concretas del equipo además de la entrenadora Cox; Emily Graig y Lauren Michelle Scott.

- "¿Has vuelto a hablar con ese entrenador?" le preguntó Nate días después, mientras le pasaba la llave inglesa siguiendo las indicaciones de la profesora Ortiz.

- "Es un observador y sí, pero ya no estoy tan segura de querer aceptar la beca" admitió dando un suspiro a la vez que apretaba la tuerca del motor. "Hemos hablado de las condiciones y tengo que estar en el equipo de Softball de la universidad que elija"

- "No veo donde está el problema" frunció el ceño. "Te encanta y no creo que te haya elegido al azar" añadió, consiguiendo que ambos se detuviesen.

- "Tenéis que terminar antes de que suene el timbre, no os entretengáis" se escuchó a Ortiz elevar la voz.

- "No es eso" continuó Lauren, pero bajando la voz mientras fijaba la mirada en el tapón del aceite. "El Softball me encanta, llevo años jugando y cuando estoy sobre el césped con el bate entre mis manos siento que de verdad puedo respirar, pero..." se pausó para girarse y buscar de la caja de herramientas un viejo paño. "No puedo vivir de eso, es muy difícil tener buenas salidas siguiendo esa carrera y solo un pequeño porcentaje lo consigue" se menospreció a sí misma.

- "Existen personas que con solo un 1% de posibilidades han cumplido sus sueños" insistió el rubio poniéndose frente a ella al otro lado del motor.

- "Tampoco es que sea mi sueño... y mucho menos sé todavía qué quiero estudiar" suspiró consiguiendo que los mechones sueltos de su coleta se movieran.

- "Cinco minutos, chicos" interrumpió de nuevo la profesora.

- "¿Por qué no pruebas a encontrar primero qué es lo que te define?" propuso Nate, mirándolo con sus profundos ojos cascada.

Dejando que la pregunta se quedase en el aire, el timbre que daba por finalizada la hora y por lo tanto la cuenta atrás para entregar el fallo del motor arreglado, sonó consiguiendo que Lauren saliera del taller minutos después con sus manos húmedas y el rubio a su lado.

La relación con éste se había mantenido desde su encuentro con Camila e incluso intimidaban un poco más sobre temas relacionados con la familia de ambos. Sin embargo, no le había hablado acerca de la latina y tampoco a ésta sobre quién era realmente Nate Grant para ella.

- "¿Sabes ya qué frase escoger para el anuario?" preguntó el más alto, mientras caminaban. "Allyson me está agobiando demasiado"

- "A mí también y todavía no" rodó los ojos al recordar los estresantes mensajes que le había mandado su amiga perteneciente al Cuadro de Honor. "Me cuesta pensar en algo que defina todos mis años aquí en el Golden Eagle" añadió, tirando de la puerta que daba paso al interior de éste.