Escalofríos De Amor

Capítulo: 8

Ya me preparé y estoy bajando en dirección al gym, en verdad es bastante grande, tenemos máquinas de ejercicio de todas clases, hay también una estantería con toallas, un cuarto por el final en el que hay una sauna, al fondo a la derecha, tenemos un zona con varias duchas por si hiciéramos varias personas ejercicios o estuviéramos allí y necesitáramos más de una ducha, también hay una zona por a la izquierda, donde hay como un tatami, para hacer los combates y uno ring de boxeo, más atrás. En la puerta del medio, hay una especie de pasadizo, para ir a una piscina climatizada cubierta y un poco escondido a unos 10 pasos a la derecha de ella, hay un jacuzzi. Me encanta eso último, aunque me gustaría mucho más tener una sesión de jacuzzi bastante sensual con besos apasionados... Vale, no puedo pensar en cosas así, no tengo pareja y obvio no se me puede pasar por mi cabeza pensar con Anna en esa escena... solo de pensarlo... mi cuerpo se me está calentando y no puedo evitarlo, se me aparecen esos labios tan tentadores, esa mirada pícara que puso antes de irse de mi lado.

Espero que le vaya bien en la clase de música, a ella le encanta y tiene un magnífico talento aunque ella es muy modesta y tímida con las personas o el público, aunque yo la he escuchado algunas veces, pero no me deja mucho escucharla de normal.

De pronto llego al vestuario que hay a la zona izquierda del gym y dejo mis cosas, cojo la botella energética y una pequeña toalla, me acerco a donde escucho golpes y música de fondo, ella está calentando boxeando con el saco, uno de los ejercicios de calentamiento que más me gustan hacer. Me acerco sigilosa para no molestarla ni interrumpir a mi profesora Serena. Observo su estilo y la forma en que su cuerpo esbelto y bello se mueve con esos movimientos y golpes contra el saco, la verdad es que es una mujer muy linda, cualquiera estaría a sus pies, seguro que tiene tanto pretendientes hombres como mujeres, aunque no sé, que orientación sexual tiene, pero no es importante para mí, me gusta cómo me da clases y es muy buena. A veces, incluso puede que me haya sonrojado con algunas acciones que me hace o bromas y yo le sigo o sorprendo con otras. Puede que sin darme cuenta, saco mi lado de coqueteo alfa jajaja. ¿Quizás podría conseguir tener algo con ella? Nah, son tonterías mías y dudo que se fijara en mí o quisiera eso conmigo, aun así, esa fantasía que tienes todos los adolescentes alguna vez de tener algo con su profesor@, siempre me atrajo, sería interesante y morboso. Jajaja vale, son muchos pensamientos y mi cuerpo aún se siente caliente por los anteriores junto con estos.

Mmmm... y una idea se me cruza por la cabeza, ¿vamos a provocar un poco a la profe?

Termino de acercarme a Sere y le tapo los ojos con mis manos, pegando más mi cuerpo a ella y le susurró al oído.

-¿Sabes Sere? Esos pantaloncitos te sientan de vicio, me están dando ganas de...

mmm... mejor no te lo digo...- Mordí su oreja.