Capítulo: 7

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Después de unos minutos observándonos las dos muy intensamente, interrumpen en la habitación, nuestra profesora Serena, diciendo que tanto ella como Filipo nos están esperando a la habitación de estudio B y en el gym. Uff, la verdad, me puse nerviosa y creo que Anna también, porque pegamos un sobre salto y nos separamos, cuando Serena entró a avisarnos. Y para colmo, en la forma de como Serena nos habló o especialmente, se dirigió a mí, porque en realidad, ella es quien me da las clases de defensa personal y ese tipo de actividades deportivas. Anna no es muy de clases de ese tipo, pero tiene una voz sublime y es por eso, que tiene a su profesor Filipo, que es de música, para mejorar y sacar su talento en canto.

-¡Hola chicas, Filipo y yo, ya estamos, os estábamos buscando!- Entonces, se acercó a nosotras, me acaricio la mejilla y empezó a hablar lo siguiente que quería contarnos. –Anna, Filipo te espera en el Estudio B, donde tenéis la clase de música, ves no le hagas esperar. – Su mirada no se desvía de mí, mientras le habla. – Els, prepárate rápido, que la clase de hoy empezara y terminara fuerte. Jajajaja –Sonreía de una forma muy poco inocente, aiss jajaja

Anna nos miraba como interactuábamos y empezaba a tensarse, yo al notarlo, le lance una dulce sonrisa. Me volví a mirar a la profe y le conteste.

-¿De acuerdo, si la señorita Sere, desea jugar duro, veremos quién da más duro? =P- le lance una mirada pícara, esto me salió sin esperarlo, a veces mis toque de seducción sin darme cuenta surgen, jajaja

Ella, se sorprendió por mis palabras cuando paro a analizarlas y sonrió como el gato de Alicia en el país de las maravillas, uiiis esto parece que llegará el peligro.

-Jajaja Veremos, ya sabes, que no soy fácil de vencer, aunque no me importaría sentir como de duro me puedes dar.- Upsss, me quede en shock, pero siguió cuando me dio un beso en la comisura de mis labios, para alejarse a los segundos mientras también alejaba su mano con una caricia en mi mejilla, me guiño el ojo y miro a Anna. Se lanzaron unas miradas asesinas creo, uy. ¿Pelea de gatas? Pensé, mentalmente, jajajaa sería gracioso y más interesante si fueran disfrazadas como si fueran catwoman miaaauuuu miaauuu!! –Bueno, me voy al gym, no tardéis mucho que os esperamos.-

Anna, seguía con su mirada asesina, yo me levante y le quise hacer olvidar de mostrar esa mirada, así que de pronto la abrace por detrás al levantarme.

-Mi princesita, no desearás hacer esperar a tu profe, venga, anda ves. Yo tengo que prepararme también.- Ella se estremeció, con las primeras palabras susurradas y se olvidó de esa mirada y empezó a sonreír, lo note. Ella se giró, se veía esa sonrisa que me hacía débil por segundos y me observo. Entonces me contesto.

-Si me lo dices así, no podré negarme, aunque me apetecería la idea de ayudarte a prepararte para tu clase o quedarme aquí contigo. Bueno, pero como hay que hacer clase, me iré.- Entonces, se me acerco al oído sin separarse de mis brazos en su cintura y me dijo. – ¡Ten cuidado, no me gustaría que te lastimas y nos vemos luego, se buen en ring, como siempre, mi tigre!- De pronto, me mordió la oreja y se fue moviendo esas caderas de forma muy sugestiva.

Aiiss, no pienses de esas formas, solo son uncontonear de caderas, nada más, es solo Anna...    

Escalofríos De AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora