RETO ACEPTADO [ꜰʀᴇᴅ ᴡᴇᴀꜱʟᴇʏ]

LOS DOS MESES PERDIDOS

CAPÍTULO 20:
Los dos meses perdidos

Llegar a Hogsmeade fue sencillo, pedí prestada la chimenea del Caldero Chorreante y fui directo a Cabeza de Puerco, no es un lugar muy agradable por lo que supe que no encontraría a ningún conocido allí. Y en efecto, no había absolutamente nadie, probablemente el tabernero estaba atrás ya que me pareció oír algo. Salí deprisa de la taberna, por suerte, no era nada raro ver a una persona encapuchada salir de allí.

Estaba oscureciendo, y no había rastro de algún alumno en las calles. El pueblo de magos se veía menos interesante cuando no lo visitaba por diversión, y sin la seguridad de que luego regresaría a Hogwarts.

Caminaba detrás de Honeydukes cuando fui jalada hacia atrás de forma repentina. Por un segundo me aterró la idea de que el atacante fuera el que me borró la memoria, pero cuando una mano amortiguó mi grito, ese tacto, recordé cierta ocasión en la que me encontré en una situación similar y deje de oponer resistencia.

Mis sospechas fueron confirmadas cuando, estando en un lugar discreto, en un callejón entre dos edificaciones, la persona en cuestión me hizo girar sobre mis talones.

- ¡Fred! - Exclamé alegre e intenté abrazarlo, pero él me detuvo.

- ¡Nada de "Fred"! - Dijo imitando el tono que usé anteriormente - ¿Qué haces aquí? Te dije que no vinieras, es peligroso.

- Y yo te dije que vendría igualmente - Le recordé - Y asumo que me creíste, porque aquí estás.

- ¿Y qué otra opción tenía? - Preguntó molesto. Se veía adorable, esa expresión no quedaba con él - ¿Eres consiente de que quien te borró la memoria es alguien que probablemente no teme usar maldiciones imperdonables?

- Claro que soy consiente, pero no puedo esconderme por siempre.

- De acuerdo - Suspiró resignado.

- ¿Y no te alegras ni un poquito de verme? - Sonreí fingiendo inocencia.

- Eres increíble - Dijo cambiando la cara larga y acercándose a abrazarme. Apoyé mí frente en su hombro y apreté mis puños con fuerza en su espalda, si no me controlaba iba a ponerme emotiva y perder la compostura.