Capítulo 1

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N. Vlad.

¿Alguna vez has amado tanto a alguien que sientes que harías todo lo que fuera por esa persona? ¿Qué cada vez que miras a esa persona dejas de pensar correctamente y olvidas de todo?

Siempre me había mostrado curiosidad la palabra "amor", era una palabra que odiaba pero a la vez me intrigaba, siempre quise saber que era el sentir el amor hacia alguien. Yo creí estar enamorado de alguien pero no era más que una simple obsesión. Aquella persona terminó en los brazos de quien en algún momento consideré mi mejor amigo, no es como si me hubieran engañado, ellos mostraron su amor entre ellos desde siempre, yo era el que no tuvo las agallas para decirle a la chica de mis sueños que la amaba, y en algún momento de mi vida empecé a culparlos a ellos por mi cobardía. ¿Por qué ella no me había elegido a mí? ¿Por qué no pude quedarme con ella? Preguntas como esa rondaban mis pensamientos en ese entonces, después comprendí que nunca me mostré como una opción para ella, nunca le di una razón para que me viera como otra cosa que no fuera su amigo, así que gracias a mi falta de confianza y malas decisiones perdí a la única persona con quién pude haber experimentado el sentimiento de "amor".

El hecho de que ya no considere mi amigo a Jack Fentom no es el hecho de que se quedara con Maddie, sino el que gracias a su estupidez mi vida corrió un enorme riesgo. Entiendo que un accidente le puede pasar a cualquiera pero si él fue el culpable de ese accidente ¿Por qué no fue a visitarme? Diciendo y presumiendo que es mi mejor amigo pero en ningún momento se preocupó por mí, ni siquiera Maddie fue a verme, dejándome solo en los momentos más difíciles, no tenía a nadie, ellos eran mis únicos "amigos" y mi familiares nunca se interesaban por nadie a menos que hayan muerto y les hayan dejado alguna herencia. No tenía a nadie, pero aun así, decidí dejar ese rencor en el pasado y no tomar importancia a lo que ellos hicieron. Por una parte, pensé que Jack lo había hecho sin querer, pues es un idiota que no toma su entorno en cuenta cuando realiza una acción o toma una decisión.

No odiaba a Jack del todo, simplemente no podía seguir congeniando con él, y Maddie es una mujer espectacular a quién quiero mucho.

En este momento me encontraba de camino a la casa de los ya mencionados a darles una pequeña visita. Sé que aunque no pueda estar al lado de Maddie de manera marital sé que puedo quedarme junto a ella como un buen amigo y junto a sus hijos; la pequeña Jasmine y el nuevo bebé, cuyo nacimiento es el motivo de mi visita.

Gracias a mi puesto de presidente general de mi propia industria "DLAV" me puedo permitir todo tipo de lujos en cualquier momento y de cualquier tipo. Gracias a mis habilidades comerciales junto con mis poderes fantasmas he podido llegar a la cima en economía y estatus, así que iba encaminado a mi destino en mi lujosa limosina negra la cual tenía unos cuantos juguetes para bebé en el maletero.

Cuando llegamos a la residencia de los Fentom el chofer me informó y salí por cuenta propia del vehículo a tocar la puerta, quien me recibió fue Jazz, la muñequita de porcelana pelirroja que quería. Al momento en que me vio saltó a mis brazos gritando "Tío Vlad" mientras reía y se aferraba a mí.

Esta sensación me encantaba, respondí su afectuoso saludo y me agache para bajarla quedándome en una posición arrodillada, como si fuera a pedir matrimonio a alguien y dejé que la pequeña revisara cada uno de mis bolsillos pues teníamos un juego en el que siempre que la viera en mis bolsillos siempre habrían pequeños regalos para ella, y, muy entusiasmada sacó lo que serían unos aretes de oro fino con forma de flor, un peluche de bolsillo con la forma de un oso y varios dulces.

- ¡Gracias Tío Vlad! – Terminado de decir esto me abrazó una vez más y fue corriendo a la sala de su casa, una sonrisa adornó mi cara, satisfecho, con aquella reacción de la pequeña hacia mí.

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