Rechazados

5. Venganza x2

Dormía plácidamente cuando el irritante sonido de la alarma se hizo presente en la habitación, me gire sobre saltada  por el gran cambio de ambiente. Ni cuenta me di cuando me fui de bruces a parar al suelo.

—Qué manera de iniciar el día —dije mientras tocaba mi nariz para verificar si no me había pasado nada en ella.

La puerta se abrió y en ella apareció un Will completamente aseado, con su vestimenta ya puesta, una cámara fotográfica colgando de su cuello y por ultimo una reluciente sonrisa en su rostro.

— ¿Qué haces en el suelo? —Pregunto—Vamos, arriba que hoy tenemos que llegar temprano al colegio —dijo aplaudiendo mientras me tomaba del brazo y me levantaba del suelo —Uff ve a bañarte que hueles horrible —dijo tapándose la nariz.

Yo sinceramente no entendía nada. ¿Por qué tanta alegría? ¿Qué es eso de llegar temprano? ¿De qué verdad huelo mal?

—Explícame que no entiendo —dije mientras levantaba un brazo y olía mi axila. Si, oficialmente me tengo que bañar, huelo horrible — ¿Por qué tenemos que llegar temprano? —pregunte.

— ¿Cómo que porque? —Pregunto — ¿Acaso no lo recuerdas? Hoy se lleva a cabo nuestra venganza y yo quiero ver como se ve con toda esa pintura —me aclaro —Y quiero quedarme con un recuerdo de ese hermosos momento —dijo mostrándome la cámara fotográfica.

—Ah bien, ya entiendo. Mi pregunta es ¿Qué vas a decir cuando te pregunten el porqué de la cámara? —le pregunte mientras sacabala ropa del armario.

—Tranquila, lo tengo todo controlado—dijo guiñándome el ojo —ahora te bañas rápido porque se nos hace tarde.

—Si mi capitán —dije haciéndole una señal.

Una vez mi hermano salió de mi habitación y entre al baño. Rápidamente me lave el pelo y el cuerpo, una vez fuera de la ducha me vestí  como un rayo ya que mi hermano comenzaba a gritar que me apurara. Todo el perfume y me puse gran cantidad por todo el cuerpo.

— ¡Vamos Skyler! ¡Se nos hace tarde! —grito Will desde el primer piso.

— ¡Mierda, que ya voy! —grite mientras me ponía las zapatillas.

— ¡Esa boquita! —Quito mi padre.

Tome mi mochila y baje corriendo las escaleras.

—Hola—dije mientras comenzaba a comer rápidamente los panqueques que mi madre había preparado—. Termine ¿Nos vamos? —pregunte limpiándome la boca.

Mis padres y mi hermano me miraban con la boca abierta.

— ¿Qué? —les pregunte.

—Fueron exactamente 2 minutos con 3 segundos —dijo mi hermano mirando su reloj —nuevo record, sigue así y te llevare al concurso del parque de diversiones para que comas hamburguesas.

—Algún día —asentí—Ahora ¿Nos vamos? —pregunte nuevamente.

—Sí, vamos —dijo mi padre mientras tomaba las llaves del auto.

Después de un viaje muy aburrido al fin llegamos al colegio. Yo me encontraba en una mescla entre ansiosa y nerviosa, le había sacado la clave a mi celular para poder alcanzar a tomarle una foto a Logan. Si todo salía bien y yo lograba sacar una buena foto yo sería capaz de imprimir esa foto y enmarcarla para luego colgarla en mi cuarto.

Nos encontrábamos en la entrada del colegio cuando vimos pasar a Logan y a Marie tomados de la mano mientras se reía. No pude reprimir una carcajada y que si ella lo acompaña hasta su casillero nuestra hermosa sorpresa les caería a ambos.