Elegidos.

Su simple peón.

Persona 3

LIAM

Quiero cambiar... o al menos quería hacerlo; dejar a mi antiguo yo y ser alguien mucho mejor y luego sucedió.

Ella llego a mi vida.

Fue repentino, fue un encuentro casual pero sin darme cuenta Lara ya estaba metida en mi vida. Ella me cambio por completo, deje de ser aquel chico inocente, tierno y enamorado de su pequeña hermanita para ser convertido en algo que yo no deseaba y mucho menos imaginaba.

Pero cuando Lara desapareció de la nada sin dejar respuestas... solo dejo un completo desastre, dejo algo irreconocible me dejo convertido en un monstruo y en la personificación del egoísmo y la soberbia.

Y Katie... mi pequeña hermanita termino pagando los platos rotos de mis errores me escape, creí que si la dejaba sería lo mejor para ambos pero me di cuenta de mi error y justo cuando regreso... sucede todo esto ahora nunca volveré a verla.

. . .

Observo a la gente pasar por la calle aún tengo aquella libreta en la mano y una colilla de cigarro en la otra mano, no tengo idea de cuánto tiempo ha pasado con cada minuto la temperatura desciende y por la posición del sol seque pronto oscurecerá pero ¿Qué importa?

Katie era lo único que importaba y ya no está ¿Qué se supone que haga ahora?

No hay familia, no hay amigos, no hay absolutamente nada... solo un vacío, un vacío que hace que por fin me levante de la silla y camine hasta al auto. No siento estar pisando el suelo, ni siquiera el frio tampoco estoy muy consciente de lo que hago; Entro al auto y dejo la libreta en el asiento de copiloto, el cansancio me mata ¿Cuántos días estuve en aquella banca del hospital?... aunque realmente eso no importa, yo no importo.

Enciendo el auto y manejo pero no tengo idea hacia qué dirección me dirijo yo solo manejo justo ahora solo quiero estar lo más lejos posible del hospital. Manejo y manejo sin dirección hasta que el combustible se agota, el auto se detiene y nuevamente no se quehacer pero no importa, no importa no saber qué hacer.

Tomo la libreta del asiento del copiloto, la hojeo pero aun así solo pienso en algo, tomo una pluma de la guantera y escribo su nombre.

Katie.

Y de pronto recuerdo a la tipa que me entrego la libreta ¿Para qué locura me dijo que servía?

-¿Liam? -La vida vuelve a mí en un segundo y me vuelvo hacia la voz. Abro y cierro los ojos sin poder creer que ella está justo en el asiento de copiloto. -¿Qué sucedió hermanito? -Me dice con voz inocente y confundida a lo que yo salgo corriendo del auto.

No puede ser... no puede ser, ¡No puede ser!

-Pero si lo es Liam-Me vuelvo hacia la loca del hospital y la miro frente a mí en la carretera -Katie está aquí justo ahora. -Me dice con un tono de voz que me hiela la sangre ¡Qué clase de broma es esta!

La loca abre la puerta y saca a Katie del auto, la toma de los hombros y ambas me miran fijamente casi sin parpadear, de un momento a otro siento que toda la cordura que tenia se esfumo y jamás volverá.

-Recuerda mis palabras, cualquier cosa que escribas se materializara -me dice y estira la mano para que me acerque, con pasos titubeantes me acerco muy despacio hasta estar a casi centímetros de amabas, la loca me sonríe y se aleja de Katie. Yo no me contengo me lanzo hacia ella y la abrazo es real, ella es real. -Pero recuerda que esto solo durara por una hora...

. . .

-¿Recuerdas cuando mama cumplió años y tratamos de hacerle una tarta? -yo asiento sin verle el rostro a Katie solo me enfoco en ver la herida de bala en su estómago que no le duele, que parece que es solo maquillaje.

-Es hora Katie -escucho decir a La loca de pronto la mirada de Katie se ensombrece y se levanta del suelo.

-¿Qué?, espera a dónde vas Katie -grito pero ella continúa caminando hacia la chica y mientras trato de alcanzarla ella se desvanece en segundos veo como una lagrima resbala por su rostro cuando se vuelve y me mira antes de desaparecer.

-la volverás a ver cuando quieras pero solo quiero que aceptes mi juego.

-¿Qué juego? -pregunto sintiendo como el odio y el dolor me invaden.

-Aun no es tiempo, solo debes saber dos cosas... Si vuelves a usar la libreta estas aceptando ser mi peón y jugar mi juego -su tono de voz y la forma en que habla con tanta soberbia, creyendo que tiene más derecho sobre mí que yo mismo, me hace enfurecer aún más.

-¿Y la segunda?

-Desde ahora frecuentaras un lugar, los detalles están en la libreta no necesito decir más. Cuídate Liam, nos veremos pronto- termina de hablar y se da la vuelta para cruzar por la carretera justo cuando un camión pasa y desaparece.

Caigo al suelo de rodillas y grito de rabia y dolor hasta que los pulmones me duelen y la voz desaparece ¿Cómo se atreve a jugar así?, ¿Cómo se atreve a hacer esto, traerla una y otra vez?...

¿Por qué lastimarme de esta forma?

. . .

Entro a la cafetería y camino por está tratando de esquivar a las personas, subo las escaleras y busco la mesa 12, me siento y espero un par de minutos... Hasta que veo llegar a esa maldita perra, la veo sentarse en la mesa 9 y pedir algo, espero un poco y ahí está tal y como decía la libreta, el siguiente peón llego a traerle una bebida...

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Gracias por leer!