Un Parker & Una Stark

Capítulo 1

Mi vida es perfecta y no todo es gracias, al apellido que llevo "Stark", sino gracias a mi madre y sí, mi padre ayuda mucho pero, casi no lo veo ya que su trabajo de vengador no me lo permite. Desde que cumplí los ocho años de edad, no vivo con mi padre, ya que él piensa que es peligroso estar cerca de su trabajo. Pero lo veo cada verano, desde los ocho años iba a visitarlo y cada día que pasaba con él, era simplemente perfecto, conseguí una familia, sí  se podría decir así, con "los vengadores".

Pero cómo les dije, mi vida es perfecta gracias a mi madre, ella tiene que hacer su papel y además él de mi padre, por ello le agradezco mucho. Mi madre y yo somos como las mejores amigas, que podrían existir en una relación madre e hija, ya que realmente le cuento todo y me siento muy cómoda con ella. Ciertamente mi madre es todo para mí.

Así que aquí estamos en Londres, me encanta en donde vivo, me encanta lo tranquilo que es, me encanta el clima de aquí, llueve y llueve me fascina, ¡¿por qué vamos a quién no le gusta estar leyendo, con una taza de café, escuchando la lluvia?! Y es verdad, que cuando visitó a mi padre, me quedo asombrada cada vez que observó Nueva York, pero no cambiará a Londres por nada.

Nuestra casa es enorme bueno, yo la consideró así, mi padre cree que no es suficiente, él se hace cargo de todos los pagos y que la casa este lo suficiente segura. Por lo tanto, tengo un chófer se llama Andrés, que también es de seguridad me sigue a todos lados, es algo sofocante pero me lo hice amigo, así sería menos pesado.

Las siete de la mañana y mi madre casi me deja sorda, por sus gritos desesperantes, para que yo ya bajará a desayunar.

-Es la última vez que te grito, ¡Emma baja ahora!- ¡oh vamos! ambas sabemos que no es la última vez
-¡estoy hablando en serio!- grita como si estuviera muy lejos.

Bajo lo más rápido posible para evitar que rompa algún cristal o mis oídos, con esos gritos.

-Hola mamá- me dirijo a la cocina y la mesa ya esta puesta, unos ricos hot cakes me esperan.

-Por fin- dice y me da un beso en la frente, mientras que yo me dispongo a devorar mi desayuno -no se te olvide llevar a Teo al veterinario, saliendo de clases- recuerda mi mamá a la vez que se sienta para comer. Teo es un pequeño perro, peludo, blanco con la nariz rosa, es la cosa más tierna del mundo.- le diría alguien más, pero sabes que Teo le gusta estar contigo- dice mi mamá con una sonrisa.

-Sí mamá tranquila, no lo olvidaré- le prometo.

Cuando mi mamá estaba a punto de decirme dónde estaba Teo, ya que no lo veía por ningún lado, mi móvil empieza a sonar y se enciende la pantalla inmediatamente, indicándome que mi mejor amigo me llama.

-Ese chico está loco por ti- afirma mi mamá, o lo cual yo solo le sacó la lengua sí, lo sé, muy maduro.

Rápidamente contestó.

-Hola... mmm ¿ya estás a fuera?... que rápido, entonces salgo en un segundo- sentencie. Marcos es mi mejor amigo, no hago nada sin él y es él único que sabe, además de mi mejor amiga, que mi apellido es "Stark" ya que, mi padre quiere mantener un perfil bajo.

-Yo no entiendo, ¿el por qué no son novios?- pregunta mi mamá.

-Mamá ya basta, sabes la situación somos felices, como amigos, nada más- digo ya harta, de que mi mamá siempre me quiere emparejar con él -y ya me tengo que ir, pero una cosa mamá, Andrés no me podrá llevar hoy, cumple años y le di el día, ¿me puedo ir sola?- preguntó con algo de esperanza.

-Claro que no Emma, además no puedes tomar esa clase de decisiones tu sola y no insistas que te lleve mi chófer- ordenada mi madre, a lo cual yo pongo una carita de perro triste -que no, apúrate que llegas tarde- sentencia mi mamá.