Capítulo 8

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Armin ve una pequeña nota pegada en su libreta. Un papel rosado con corazones de fondo y letra cursiva bastante bonita que la llenan.

"¿Tienes novia?"

Mira desinteresadamente el papel, pensando que parece más algo hecho por un niño de primaria que una persona de universidad. Es bastante infantil, pero de alguna manera le parece enternecedor el gesto.

Una chica sonrojada corre a su asiento después de entregarle la libreta que pidió con la excusa de copiar apuntes. Es la segunda vez en la semana que le sucede lo mismo y sólo se recuerda rechazar lo más sutil que pueda.

—Que envidia —le comenta Jean, con quien comparte la clase de inglés ese día. El chico rubio cenizo le observa con los ojos entrecerrados mientras sostiene su cabeza de lado para mirarle—. Dicen que los chicos buenos siempre obtienen a las mejores chicas.

Armin no está muy seguro de ello, pero sonríe en respuesta. Quita la nota y abre su libreta, Jean comprende que su amigo no quiere hablar de ello porque le incomoda.

Para cuando termina la clase, una linda chica rubia y algo bajita le espera en la puerta, le pide que le siga a los edificios de atrás y él no puede negarse.

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Zoe se dirige bastante animada dando pequeños saltos al aula donde Erwin da clases, según el horario es su hora libre y quiere compartir el almuerzo —más bien robarlo — y volver a su laboratorio con la barriga llena y el corazón contento.

Entra al salón gritando su nombre, el sonido tan estruendoso hace eco en los vidrios que retumban, y alcanza a ver como su amigo rubio se esconde haciéndose a un lado, un gran acto de reflejo considerando su masa muscular.

Una mueca molesta aparece en su siempre serio rostro pero que intenta ocultar.

—Zoe —dice el rubio con desgano —. ¿Sucede algo?

La mujer sonríe maliciosamente y se escabulle hasta la ventana dónde Erwin estaba espiando. Ve a una rubia cabellera conocida y a su amigo mirarle con el ceño fruncido. Hanji ríe pero no se burla, ya muy mancillado está la dignidad del más alto.

Armin se encuentra con una linda universitaria de expresivos ojos y tímida sonrisa. Rubia, muy rubia y parece ser que los rubios se atraen entre si. No parece que solo estén en una charla de trabajos escolares, pues están en la parte menos transitado del plantel y al parecer eso molesta mucho a Erwin.

Smith sale de la clase con rumbo desconocido y ella piensa que fue una gran idea ir, le contaría a Leví cuando le viera y eso seria muy divertido.

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Armin recorre los pasillos del edificio de Eren en busca del laboratorio, necesita encontrar al profesor de psicología, al que le gusta escabullirse al laboratorio para tomarse un poco de su licor.

Lo encuentra hablando con Hanji Zoe en una plática bastante elocuente, la sonrisa sonora de ambos le hace pensar que lo es, al menos.

Retrocede, no quiere pensar que su tormento personal esté cerca y eso sucede cuando una mano grande le toca el hombro.

Le da escalofríos de nervios y casi corre.

— ¿Buscas a Eren? —pregunta Erwin, el tono de reproche evidente en su voz.

—Si —responde casi sin pensar. No lo busca y espera no encontrárselo o tecleará de nuevo al profesor y ya no necesita más visitas al director

—Tiene clase.

— ¿Cómo lo sabe? —Le encara, se dice a si mismo que nada puede intimidarle. La mano que le sostenía cae y aunque se dio ánimos no puede mirarle a los ojos.

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