capitulo 12

5.8K 291 49
                                    


— A ver señor "Alma gemela" — Lo empuje con la punta de mis dedos, apartandolo varios centímetros. — Primero que nada TÚ —lo señalé— solo estas en mí casa de arrimado. No se si es magia lo que haces o lo que sea pero te creo. Te quedaras aquí el tiempo que sea necesario o hasta que tengas otra casa — finalice seria.

Si creía que le tendría miedo, estaba muy equivocado. No dejaría que él pase sobre mí e imponga su decisión. Soy lo suficientemente madura para pensar y decidir lo que es conveniente para mí y lo que haré.

— Mi existencia depende de ti. Así que tendremos que estar juntos el resto de la vida — Habló serio. Su voz sonó ronca y su ceño estaba fruncido.

— En ese caso tú dependes de mí. Yo no te necesito, tú a mí si—razone— Asi que te empiezas a comportar o despidete de este mundo.— amenacé seria. Cruce mis brazos sobre mí pecho haciendo hincapié a mi enojo.

— No me hables en ese tono — Gruñó furioso, cerrando sus puños hasta que sus nudillos se volvieron blancos.

— No vuelvas a repetir lo de hoy. — Hablé haciendo caso omiso a sus palabras. — Jin es MÍ novio y mi futuro esposo, así que no trates de arruinarlo — Gruñi molesta.

— Tsk~... — bufo y una seca sonrisa se dibujo en su rostro — Pero no lo amas — Negó seguro, con cierto tono de diversión.

— ¡SI LO AMO! —Alce mi voz exaltada. Yo amaba a Jin, con cada rincón de mi ser.

— Si lo amaras te negarías — Se acercó a mí y rodeo mi cintura con sus brazos. Elevó mí cuerpo y me lanzó contra la cama. En un abrir y cerrar de ojos estaba a horcajadas sobre mí.

— YoonGi ¿Quieres morir? — Dije molesta. Intentando disimular mí respiración agitada, mi pulso acelerado y mi corazón palpitante.

— Te necesito para vivir~... — susurró con su gruesa y seductora voz. Acercando su rostro a mí, acortando la distancia y uniendo nuestros labios en un lento y tierno beso.

“Ok... Esta será la última vez” Pensé.

Cerré los ojos y me dejé llevar por las sensaciones de aquel beso. Mis piernas temblaron y una oleada cálida recorrió mí cuerpo. Un hormigueo se hizo presente en mis extremidades. Alce mis manos y lleve una a sus cabellos y otra a su nuca, profundizando el beso.

Él separo mis piernas y se acomodó entre ellas, pude allí sentir su creciente erección sobre mí intimidad. Él bajo su mano, alzó mi falda, corrió mi braga y rozó su erección sobre mi clítoris hasta que mi entrada comenzó a empaparse.

— YoonGi — mumure agitada, cortando el beso. Mi pecho subía y bajaba con rapidez. Mi temperatura corporal aumento y mis mejillas seguramente estaban rojas.

Una pícara sonrisa se dibujo en su rostro e introdujo solo la punta de su glande en mí interior. Suspire se frustración, necesitaba todo de él en ese momento.

— YoonGi deja de jugar — murmure frustrada y molesta. Necesitaba que él se uniera a mí, mi cuerpo estaba deseoso por ello.

Él ignoró completamente mis palabras. Bajo sus labios a mí cuello y succionó mi piel. Me entremeci por completo y mi piel se erizo. Mi intimidad comenzó a palpitar con fervor, con necesidad.

— ¡Ya YoonGi! — Bufe molesta, tirando levemente de su cabello.

— No lo haré hasta que admitas que me necesitas — susurró con voz ronca sobre mí oído.

— No seas infantil — Frunci el ceño furiosa.

— como quieras — asintió, salió de encima mío y se sentó a un lado de la cama.

— mierda... — musite. Me ergui y apoye mi mano en su hombro.

Calle varios segundos. No quería admitirlo, mi orgullo no me lo permitía pero debía aceptarlo. En este momento necesitaba de él.

— YoonGi yo... — Callé. Sentí como su cuerpo se tensaba ante mi tacto.

Yoongi y tu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora