En esta vida nos topamos con diversas cosas que al final nos cambian de una manera radical. Puede ser una mala noticia como una enfermedad terminal, que ganamos la lotería o que el amor ha tocado las puertas de nuestro corazón, en esta especial terminamos totalmente cambiados.
Lo más gracioso es que lo común en estos tres ejemplos es que nunca estamos o nos sentimos preparados para recibirlas, algunas son buenas, otras no, pero al final son inesperadas. Vas caminando por la vida tranquilo y de la nada te enteras de que vas a morir, o que vas a ser millonario por un tiempo. Vas dando un paseo por el parque y el pensamiento brinca en tu mente "Ojalá estuviera aquí conmigo" y tu corazón brinca de tan sólo pensar en esa persona. Ahí comienzas a cuestionarte si de verdad sientes algo por esa persona o simplemente aprecias su compañía, sin saber que realmente estás cayendo en las redes del amor.
El tiempo es algo que nadie puede controlar por más que queramos. En especial en el amor, puedes pasar tres años con una persona y saber que la quieres, o puedes conocer a una persona en tres horas y darte cuenta de que es con quien quieres pasar el resto de tu vida.
xx.