oneshots pentagon

cortes 1/2(huidawn)

[hyojong:16 años. Hwitaek:17 años. Yoohyeon: 16 años.]

—puto drogadicto quítate de aquí! —dijo uno de los estudiantes que cruzaba el pasillo más transitado del instituto— que no oyes hijo de puta, muévete o suicídate cualquiera de las dos me viene bien—hyojong simplemente lo ignoro, eran tan frecuentes los comentarios de ese tipo que se había acostumbrado a ellos, simplemente rodó los ojos.

Al principio le afectaban en demasía esos comentarios a tal punto de llorar desconsoladamente cada vez que se lo decían logrando que todo se burlaran del, "cry baby" era una de los muchos apodos que le ponían, su autoestima disminuía considerablemente, con el paso del tiempo sus brazos comenzaron a sufrir las consecuencias, es decir se llenaron de cortes.

Aun que ya esos comentarios no le importasen sus bazos seguían sumando cortes, eran una de las maneras con las que se podía desahogar, también comenzó a dormir cada vez menos, haciendo que sus ojeras crecieran, sus padres eran ajenos a ello, creían que era porque estaba hasta altas horas con su celular.

Ellos no notaban a su hijo cada vez más deprimido, que quería terminar de una vez con su vida, que la falta de cariño y atención era una de las principales causas de su depresión.

— ¿te vas a mover o no pedazo de mierda? —el rubio se quitó del camino del muchacho, y este siguió con su camino, hyo suspiro y emprendió camino a su clase, cuando entro al salón todos voltearon a mirarlo e inmediatamente, al darse cuenta de que se trataba del, se dieron media vuelta siguieron con lo que hacían.

Su vida era para los demás algo insignificante, hasta para el mismo lo era, pero cuando conoció a hwitaek su vida cambio, pero mas para mal que para bien ya que los chicos que lo molestaban tuvieron otra razón para molestarlo, era gay, claramente eso no tenia nada de malo, pero al parecer para los demás si, otra razón más para desaparecer.

Hwitaek el típico chico popular, amable, lindo y todo eso que es bastante cliché, simplemente el chico deseado por todas las chicas y chicos, tenía una hermosa voz, era atleta, simplemente perfecto.

Ya pasadas las tortuosas horas de clase hyo se aproximo a la salida para por fin irse, pero algo le llamo la atención, había un grupo de gente en la entrada, no quiso entrometerse, pero la curiosidad fue mayor y de igual forma se acercó. 

—¿así que hwi-oppa querría ser mi novio? —pregunto Yoohyeon mirando con unos ojos brillantes al mayor, ansiosa de escuchar su respuesta, por otro lado estaba hyojong que miraba atento al recién nombrado esperando, también, su respuesta.

—s-si, si quiero ser t-tu novio—dijo,  Yoohyeon se lanzo a los labios del mayor, el grito de los demás estudiantes resonó, ellos sin duda alguna serian la pareja de año. Los ojos de hyo se llenaron de lágrimas, sus pies comenzaron a moverse solos, quería decir sus sentimientos, pero, el miedo que tenia a que se burlaran del era mucho mayor, así que solo huyó de ahí.

En la noche, cuando todos dormían se acerco lentamente a su comoda donde guardaba a sus amigas, las saco y se dirigió al baño, lleno la tina con agua y espero a que se llenara, cuando estuvo a punto de rebalsarse se introdujo en ella, tomo las navajas y las comenzó a pasar por sus brazos lentamente, sus lagrimas bajaban por sus mejillas, el ardor en sus brazos era insoportable, pero era la única forma, que el creía, posible calmar su dolor.

El agua de la tina se comenzó a teñir de rojo. De pronto se escucharon unos pasos, y posteriormente un grito de terror. Hyojong estaba débil, había perdido demasiada sangre, de la nada se desmayó.