Enamorado de la novata ~JungKook & Tú~

Capítulo 17

Narra Jungkook.

— ¿Dónde está ___?

— En casa, ¿Por qué?

— ¿Cómo qué "por qué" Taehyung? Tú sabes muy bien lo que pasa.

— Lo sé, pero también piensa, si viene aquí, vendrán a buscarla.

— ¿¡Y crees que estando allá fuera no lo harán!? ¡Será más fácil que se la lleven!

— Entonces... — dudó. — cuídala tú. Ambos sabemos que si yo estoy con ella, será muchísimo más fácil que la amenacen, ¿No lo crees?

«Si, lo creó. Pero corre más peligro conmigo»

— Que nos ayude J-hope.

— ¿Por qué? — no hablé. — a caso, ¿Te enamoraste de ___?

No respondí.

«Exactamente eso pasó Taehyung, y sé que le gustó, y ella... por las personas que ama haría hasta lo imposible, y yo... simplemente no me rendiría hasta tenerla conmigo. Me preocupa que Young Mi venga, y cumpla su promesa, aquella dónde dijo que arruinaría mi vida, para que sepa del dolor que ella sintió cuando yo le quite a su hermano Kwan. De eso tengo miedo Taehyung, y no quiero que me odies porque para mí, tú eres mi mejor amigo.»

Por fin pude responder.

— No quiero que pierdas a la persona más importante de tú vida. — si, mentí.

— No te creó. Sé que la quieres, y también sé que ella igual. — vaciló. — le diré a J-hope que nos ayude.

Tae salió de su oficina. Yo me recargue en la pared y lentamente fui bajando hasta quedar sentado en el suelo.

«¿Cómo puede pasarme esto? ¿Por qué con ella? No sé que haría sin ella, pero tampoco puedo ser su novio.»

Empecé a recordar cuando pase tiempo con ___ en París.

Flashback.

Salimos a pasear cuando estábamos en París. Acababa de llover, y a ella se le apetecía salir a caminar para ver si encontraba un arcoiris.

— Cuidado ___, no te vayas a resbalar.

No me hizo caso y siguió pasando por zonas mojadas. Se distrajo con un peluche de unicornio rosa. Dio un paso en falso y resbaló. Reaccioné rápidamente y la sujete de la cintura, así, quedando nuestros rostros muy cerca.

Ella evitaba mirarme, sabía que mis intenciones, aparté de evitar le la vergüenza pública, eran de besarla. Así que, dudando un poco, le di un pequeño beso. Retomó el equilibrio y se alejó de mi, muy sonrojaron, y seguimos en la búsqueda de un arcoiris.

Fin del flashback.

Sonreí, no puedo creer que aquella niña entró en mi corazón. Y temo por ella, porque las palabras de Young Mi siguen en mi mente. Su venganza.
Simplemente tengo que proteger la, así estará a salvo, y no sufrirá.

Me levanté del suelo. Decidido a protegerla, no me importa si tengo que dar mi vida por ella, lo haría mil veces si fuera necesario. Simplemente porque estoy enamorado de la novata.

Narra ___.

Suga y yo salimos a caminar por ahí, sin ningún tema de conversación. Sé que está molesto, no quería salir de casa, pero es necesario, necesito distraerlo para empezar a investigar un tema que involucra a mi hermano, a Jungkook y a él. Vi un puesto de comida.

— ¿Quieres ir a comer? — pregunté.

— No. — respondió fríamente. — regresemos a casa.

— ¿Qué? ¡Pero si acabamos de salir!

Y no miento, solo hemos caminado como por ¿Quince minutos?

— Dije vámonos.

Cedí. ¿Por qué? Bueno, es más sencillo buscar información en dónde estás más cerca y accesible. Empezaré revisando la habitación de Tae.

No debería hacer esto, pero tampoco tengo de otra. Si no me quieren decir que pasa, lo descubriré por cuenta propia.

— ¡Hey, Min YoonGi! — Suga mostró frustración cuando un chico le habló.

— ¿Qué quieres Kim?

Mi sexto sentido reaccionó rápidamente. Cuando fueron por mi, y no me encontraron, él chico le dijo al otro: "Kim, cálmate". O algo así, no recuerdo bien.

— Saludar. Hola. — me volteó a ver el chico guapo. — ¿Es tú hermana?

— Es mi amiga. — respondió Suga.

— Un gustó, soy Kim Seokjin.

— Kim ___. — definitivamente no es él. Su voz en un poco más aguda al otro Kim.

— ¡Otra Kim! Vaya, hay que conocernos. Vamos a comer, yo invito.

Y sin dejarle hablar a Suga, acepte.

(...)

«Vaya, Seokjin come demasiado»

— ¿Terminaron?

— Si. — dijimos al unísono Suga y yo.

— Bien, voy a pagar y nos vamos. — Seokjin se levantó de su silla y fue a pagar.

— ¿Por qué aceptaste? — me reprendió Suga.

— Tenía hambre, y sé que tú también.

— Si, pero al menos yo sí podía esperar hasta llegar a casa.

— Tú si, pero yo no. — me levanté — me voy.

Él también se levantó.

— ¿A dónde?

— Llegué chicos... ¿Ya se van? Pensé que podríamos ir por unos helados y conocernos mejor.

— Gracias Seokjin. — me interrumpió.

— Dime Jin.

— Gracias Jin, pero temo que ya es hora de regresar a casa, supongo que mi hermano ya a de estár allá y se esté preguntando por nosotros. — entendió.

— Al menos dame tu número de teléfono, seguiremos comunicados ¿No? — asentí.

Le di mi número. Suga y yo nos fuimos del pequeño restaurante. Llegamos a casa y subí a mi habitación.

«Esto será más difícil de lo que pensé»