Trece

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Pensaba y pensaba en lo que pasará luego de hablar con él.

Su relación era una de amistad y de amor o, por lo menos, eso era lo que uno de ellos sentían.

Krist estaba muy confundido sobre todo lo que había pasado esas últimas semanas, que ya no podía soportarlo.

P'Off le dijo que hablara con el moreno para aclarar las cosas, y si de verdad estaban enamorados, lo arreglarían y tratarían de superar todos sus problemas para vivir el amor que se pueden tener.

- Krist — al escuchar el llamado del moreno volteó. Él chico le quiso dar un beso, pero Krist giró su rostro haciendo que las acciones del otro se detuvieran — ¿pasa algo?.

Puede que esta sea la conversación más dolorosa para Krist, pero ya no soportaba más lo que estaba pasando. Le hacía daño y no sabía si Singto era consciente de eso o tal vez sí, pero no podía más con todo.

- P'Singto... Ven — guió a su P' hasta la azotea de la universidad, ya que no era muy concurrida y podía hablar con tranquilidad.

El camino hasta ese lugar fue de un silencio total. Singto abrió la puerta que había para entrar a la azotea y entró seguido de krist.

El silencio era abrumador y al parecer Krist tenía todas aquellas palabras atoradas en su garganta.

Sentía que en cualquier momento lloraría, ya que le empezaron a picar los ojos y su visión se nubló un poco.

- ¿De qué querías hablar? — preguntó el mayor con algo de temor, pero no lo demostraba.

"Él nunca demuestra sus emociones"

- Singto yo... — respiró hondo tres veces y con algo de temor comenzó — Singto para mi esta situación es muy difícil. No entiendo lo que me pasa, pero desde que empezamos con esto me siento mal. No encuentro un momento de paz y casi siempre estoy triste. Cuando estoy a tu lado siempre hay algo que me atormenta y no sé que hacer, no sé lo que siento e intento entenderte. Intenté comprenderte cuando me dijite que te sentías inseguro e incómodo, intenté comprender que aún no la olvidabas. Acepté cuando me dijiste que no podías hablar conmigo y que era porque en las tardes no tenías tanto tiempo para mi, pero... No te creí.

Singto escuchaba atentamente sus palabras, pero no mostraba ninguna emoción.

"Nunca me diste seguridad"

- Siento que yo doy más de lo debido y de verdad quiero estar contigo, pero me siento tan cansado y desgastado... Me siento tan inseguro a tu lado que ese día que te conté que tenía problemas y prometiste estar a mi lado, yo solo pensé en cuanto te iban a durar esas palabras ¿hasta que te de nuevamente tu crisis existencial y yo volviera a sufrir nuevamente?. No te quiero perder, pero todo esto me hace... m-me hace d-daño. — su voz salió entrecortada, pero ya se estaba acercando al final — tal vez tú y yo somos más amigos que algo más y yo no quiero esta situación. En lugar de encontrar paz a tu lado... me siento mal. Y quiero saber como te sientes, porque ya di todo lo que podía dar y no puedo más.

Al terminar, Singto cerró los ojos, pero Krist no sabía porqué.

Pasaron algunos minutos y cuando al fin los abrió el menor vio reflejada la angustia y confusión.

Era verdad que tal vez sus palabras habían sonado duras, pero todo lo que tenía encapsulado en su corazón y en sus pensamientos, salieron.

Singto avanzó hacia él y sin esperar, más lo abrazó. Fue el abrazo más fuerte en la vida de los dos.

Tal vez ellos se querían mucho, pero lo habían confundido todo y ahora estaban en ese lugar, sólo abrazándose y sin decir ninguna palabra.

Esa tarde cada uno se fue por su lado a casa. No hubo un "Esperame que ahora salgo" o "¿Te espero?". Simplemente cada uno tomó su camino.

Los días pasaron y el corazón de Krist estaba más tranquilo. Se desahogó y se dijo así mismo que tal vez ese no era su momento o que nunca lo sería.

Pero por primera vez en todos esos días, Krist veía al futuro y en ese, ellos sólo eran amigos y de esos que sí serían para siempre.

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He vuelto y esta historia salió desde lo más profundo de mis pensamientos.

Pero bueno :D

Estas semanas estoy con lo de los exámenes y eso xd

Bueno... Un besazo, un saludo y nos vemos.

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