La apuesta (pearlnet) ~

"¿Tendrás Café?"

Pov perla

Me había quedado dormida sobre el sofá de la sala, estaba cansada, no quería levantarme, por desgracia amatista comenzó a gritar por la casa, termine levantándome de mala manera.

- ¿porque estas gritando? - me senté en el sofá frotándome los ojos.

- no despertabas - dijo acercándose a mi - ¿garnet fue muy ruda anoche? - hablo de la nada, al parecer ya había amanecido.

- ¿de qué hablas? - ella apunto hacia mi pecho, mire solo para ver que aun traía puesta la ropa que garnet rompió con los dientes, me cruce de brazos intentando cubrirme - solo no digas nada... - amatista me miraba con una sonrisa pícara, yo solo intente ignorarla.

- ¡vamos tienes que contarme! - comenzó a decir, me resultaba tan molesto.

- no pasó nada, deja de verme así.

- vamos, garnet salió hace un momento y realmente se veía cansada.

- ¡¿que?! ¿Garnet estaba aquí? - no creía sus palabras, se supone garnet se fue anoche y por lo que dijo, pensé que no volvería.

- estaba en el sofá al lado tuyo ¿porque preguntas tan sorprendida?

Supongo que garnet no le comento nada sobre lo que paso - no es nada, ¿sabes dónde está ahora? - le medio sonreí.

- pues hace un rato la vi en la playa - apenas la escuche camine hacia la ventana, como dijo amatista ahí estaba garnet parada viendo el mar.

No lo pensé por mucho y salí en dirección a ella, cuando iba a medio camino garnet me miro, eso hizo que me detuviera y solo la mirara, esta solo camino hacia mí, al menos eso pensé, ya que paso de largo... Y entro a la casa.

- regreso cuando se fue anoche, rayos, desearía no haber estado dormida - mire la arena bajo mis pies - ¿ahora simplemente me ignorara?

Pov garnet

- hey garnet ¿qué pasa? te ves triste - cuando entré a la casa lo primero que vi fue a amatista, tranquilamente me senté en el sofá.

- amatista quiero decirte algo - comencé a decir, ella solo me miro - perla tiene mucho que pensar, quiero pedirte de favor que la dejes y no le diga nada en lo más mínimo.

- ¿nada sobre qué?

- sobre nada, principalmente de mí, simplemente déjala sola si te lo pide y no insistas - la mire.

- ¡¿porque no me dicen que pasa?! - amatista comenzaba a desesperarse - ¡yo también vivo aquí!

- basta - me levante - ya es demasiado difícil pensar que voy a perder a perla como para que vengas a cuestionar lo que se te está pidiendo de favor, ¿porque no solo puedes hacer caso por una ves? - no podía seguir ocultándolo, estaba devastada, solo quería que todo esto acabara ya, no pensaba más que en perla, era demasiado difícil para mí.

- bien, lo hare, perdóname no sabía que se tratara de eso - comenzó a decir - dejare a perla en paz - dijo y me sonrió.

le sonreí de vuelta y camine hacia la puerta del templo y entre a mi habitación.

pov perla

me quedé un tiempo en la playa después de que garnet se fuera, no mucho después vi a amatista salir de la casa, corrí hacia ella.

- ¡hey! - esta me miro - ¿garnet se fue?

- ¿garnet? - comenzó a decir, miro hacia la casa y luego me volvió a mirar - ella salió en el portal y no dijo a donde fue.

- entiendo - entonces así será, ella estará evitándome.

- iré con vidalia - me dio la espalda y camino - se me olvidaba steven se quedó con greg, dijo que después vuelve, chao - dijo como ultimo y se fue.

me había quedado sola, ¿porque es tan complicado? no puedo evitarlo, me sentía mal, de nuevo garnet y yo estábamos separadas por mi culpa, soy una idiota, es como si lo hiciera apropósito, desde el principio me dio miedo, ¿porque sería diferente ahora? - incluso he llegado a pensar que... debo olvidarme de ella - después de decir eso mi mente no pensó más, y finalmente pude volver a escuchar solo las olas del mar chocando con la arena, después lo único que pude sentir fue tristeza, me deje caer donde estaba y solo me senté mirando el horizonte, me quede ahí hasta el atardecer.

pov garnet

no podía dejar de pensar en ella, por más que lo intentaba no podía estar tranquila, decidí salir un momento a la casa, cuando abrí la puerta no se escuchaba nada, al parecer estaba sola en ese lugar, suspire, camine hacia el sofá y solo me dispuse a sentarme, pero al mirar por la puerta vi que no muy lejos de la casa estaba perla sentada frente al mar, me acerque a la ventana, desde ahí pude verla mejor, termine quedándome ahí, de la nada perla vio hacia la ventana, me deje caer de espaldas apenas vi que volteo, no lo dude y solo decidí volver a mi habitación.

pov perla

- ¿qué es eso? - mire en dirección a la ciudad, se escuchaba un motor de alguna moto muy cercas de la playa, mire, pero no veía nada, cada vez se escuchaba más cercas, finalmente pude verla y parecía dirigirse a mí, me levante de donde estaba, la moto se detuvo justo enfrente de mí, levanto la arena cuando freno, esa moto me era conocida.

- ¡hey perla! - cuando se disipo la nube de arena pude ver de quien se trataba, era esa chica de cabello rosa, me sonreía mientras se quitaba el casco - ¿qué haces aquí? - dijo.

- yo vivo ahí - apunte a la casa y le sonreí.

- vaya que vives algo lejos, me sorprendió verte ahí sentada, te vi desde el faro y pues apenas te reconocí vine a saludar.

- ya veo - no puedo dejar de verla, esa chica brillaba junto con sus ojos y sonrisa - ¿que haces en el faro?

- huir... - dijo como si nada.

- ¿de qué? - la chica se acercó a mí y miro el mar.

- después de que te fuiste estuve con una chica, ella y yo nos juntamos y pues ahora en lo único que pienso es que no quiero volver a verla, fue cuando me acorde de una chica de ojos azules - me miro - casualmente fue cuando te vi, fue como el destino, no lo dude y solo decidí verte a ti y tus encantadora mirada, aunque de haber sabido que vives aquí desde antes me hubieras vuelto a ver, aun así, nunca había estado de este lado de la ciudad, pensé en acampar en el faro esta noche, ya que la chica que te digo está sacando sus cosas de mi departamento, así que ya que te vi y salude puedo irme - me volvió a sonreír, había olvidado que esta chica sonríe mucho.

- espera - esta solo me miro - ¿porque no te quedas conmigo? esta noche solo estaré yo.

- ¿y la chica de aquella ves? ¿no se enojará? - dijo con una ceja arqueada.

- no te preocupes, ella no lo sabrá - le sonreí - aparte tú fuiste muy amable conmigo aquella vez, quiero regresarte el favor.

ella comenzó a reír - bien perla, entonces ¿tendrás café? - después de eso comenzamos a caminar hacia la casa.

garnet no ha regresado, supongo que estará bien que la chica se quede toda la noche. 

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¡hey! espero te haya gustado y gracias por leer.

chao chao

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