Once ✩Al Fin En Corrección y Revivición✩

Capítulo 10

Mariana's POV

- Su alteza real, princesa Mariana ¿Está segura de eso? - Preguntó un agraciado joven de traje negro bien cuidado.

- Por supuesto que si, ¿No vez que es mi mate?, mi Omega, mi vida y mi todo? - Replico con enojo - Es la única persona con la que necesito tener hijos. No me importa lo que diga el Rey o la Reina, ya le marqué y ella es mi responsabilidad. - Vuelvo a calmarme mientras impaciente deseo que todo esto vaya bien.

Al llegar, mi guardaespaldas procedió a dejar en el hospital a Diane, por el reconocimiento la atendieron inmediatamente y muy poco después llegaron de golpe los capitanes de cada equipo que Diane dirigía, probablemente no quisieron llenar el lugar con unas 50 personas.

También los medios se hicieron ver, su alteza real, la princesa Mariana de Dellatore había traído consigo a la Líder Omega de la Armada Nacional, por primera vez malherida y que incluso se rumoreaba que estaba marcada.

Era el hit para cualquier periodista, ¿Su alteza real marcó a la Líder de la armada?, ¡Diane, la Líder de la Armada nacional por quien se debatió la prohibición de Alfas en la armada ¿Ahora es Omega de la segunda Princesa?¡, !Inesperado suceso entre Diane y su alteza real, la princesa Mariana, ¿Ahora son pareja?! ¿Como responderán los Reyes ante esta situación? Millones de primicias rondaban los periódicos, canales, radios, redes sociales y todo lugar por donde se pueda publicar una noticia.

- Mi Princesa, su padre el Rey ha ordenado llamarla - Me habló uno de los guardias reales.

- ¿Cómo, mi padre está aquí? - No, y pensé que tendría tiempo de volver normalmente. Maldición porque nada me puede salir bien. Me envuelve una ola de frustración, ¿Cómo, al ser la Princesa de un maldito reino no puedo ni durar el primer día con mi elegida?

- ¡¡Nana!! - escucho gritar, con esa aguda voz que bien conozco.

Erick, Su majestad, el rey Omega me abrazó por detrás. - Mi niña, me preocupé tanto, ¿dónde has estado? cuándo escuche que estabas en el hospital y después vi que habías traído a la señorita D ¿Qué pasó? Y ¿Porqué ella tiene una marca? ¿Sabes que tu madre nos va a matar verdad? - Papá estaba por convalecer mientras que yo ahora tenía un nuevo problema.

- Papá por favor retírate y dile a mi madre que volveré muy pronto - Pido de manera suplicante.

- P-pero hija si vuelvo ella me castigará - hace un puchero y yo plancho mi frente con la palma de mi mano apenas lo escucho.

- Papá, ¿No se supone que eres el hombre de la relación? - pregunto sin esperanzas.

- Yo solo soy el Omega - Comienza a lagrimear. - Astrid me manda a mi, a la casa, al dinero y al reino - Por Deos como rayos hay quien le diga Su majestad el rey de Dellatore orgullosamente.

Como pueden notar, mi padre es el gobernado y mi madre es la que domina el lugar, es la primogénita y al ser Alfa consiguió un derecho al trono cual consiguió a sus 33 años. Mi madre ya habría encontrado a papá y hecho a mi hermana mayor Elizabeth. Si, con su buen nombre de princesita. Hasta sus 15 años fue criada de una manera neutra, entre espadas y agujas pero al presentarse como Alfa se le declaró heredera al trono y fue enseñada para tal. Yo nací cuatro años después y me criaron para ser leal a mi hermana y ayudar en todo su próximo reinado.

Un día no aguanté la presión y simplemente escapé cuándo pude con la intención de vivir tranquila y fuera de esa vida, al día siguiente di un paseo y justo me encuentro a Diane. Poco después la situación me obligó a llamar a mi chofer de incógnito como ambulancia y los medios se encargaron de devolverme a "casa".

- Bien papá, entonces ¿Podrías acompañarme dentro? - Digo suspirando y mientras mando a pedir una bebida, la sed y las ansias empeoraban mi situación.

- ¡¡Claro!! Lo que sea por mi hija - Contesta alegremente mi papá.

- Ajá... Bien, iré a ver que me dicen los médicos - Al girar noto que un Doctor y dos enfermeros se dirigen hacia nosotros.

- Su alteza real, princesa Mariana, ¿Me daría el honor de hablarle a solas? - Pregunta el médico.

Inmediatamente lo sigo, ignorando cualquier puchero por parte de mi padre por dejarlo "solo".

- Le hemos hecho a la señorita Diane una pequeña cirugía de emergencia, aunque la herida fue superficial estuvo a punto de sufrir un paro respiratorio por la inflación de sus vasos y cerebro. Resumiendo sufrió una encefalitis, pero doy las buenas noticias que justo le hemos estabilizado con analgésicos y antiinflamatorios - Mi cuerpo se relajó inmediatamente, ella estaba bien a pesar de todas esas chorradas del doctor, ella aun vivía y no dejaré poner más que peluches en esa estantería.

- ¿Puedo verla? - el Doctor asintió gustosamente.

- No toques su cabeza y todo estará bien, debería despertar para mañana en la madrugada, por lo que vi su cuerpo está bastante cansado y junto a la anestesia durara un rato, la dejáremos dos días en revisión - Termina por fin y me guía a la habitación de claro lujo donde dormía Diane.

Yo lo seguí con un notorio sonrojo, pues sospechaba que el doctor ya sabía lo de nuestra noche.