"Se me están durmiendo las manos de tanto cruzar los dedos,
como si así todo fuera a ir mejor.
Se me están durmiendo los pulmones
de tanto soplar unas velas que nunca se apagan
ni cumplen deseos.
Se me están durmiendo las piernas de tanto correr
para llegar a una casa
donde ya nadie me espera.
Se me duerme el corazón,
agotado,
de tanto reponer sangre después de cada golpe.
La sonrisa,
y ahora parezco uno de esos muñecos con las comisuras al revés.
Se me cierran los párpados porque no quiero darme cuenta,
no quiero ver
que de nuevo no he llegado a tiempo.
Me estoy durmiendo,
y lo que es peor,
ni aún así consigo soñar
ni que empiece a las horas un día nuevo."
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Loreto Sesma
RandomMe refugio en una canción que siempre vuelve en invierno y este frío me recuerda que soy humana (pero también frágil)