NARRA KEYLA.
Tengo 35 años, mi hija acaba de cumplir 18 años, solo somos ella y yo.
Cuando Grecia se fue de mi vida, necesitaba encontrar con que distraerme, necesitaba hacer lo que siempre quise, superarme, así que entre a estudiar psicología mientras daba clases en la prepa, también entre a trabajar en una universidad dando psicología, la verdad que soy muy buena en lo que hago, y mi hija quiere seguir mis pasos.
Mis hermanas menores ya tienen 14 años, y mi hermana Aylin decidió estudiar medicina, y es excelente tanto como maestra, como doctora.
Desde hace más de 5 años que no se nada de Grecia. Espero que esté bien, la última vez supe que se había casado con un hombre, y que había dado a luz a una hermosa niña, pero fue lo último que supe de ella.
Keylin ha preguntado por ella unas 100 mil veces, pero está bien, se que la extraña, pero ella sabe que la dejo, que la abandono.
Cuando creí que jamas me volvería a enamorar de nadie más, ella apareció, si esa chica que desde que la vi, algo sucedió conmigo, y solo deseaba tenerla para mi.
Pero me estoy adelantando, no les arruinare la historia, empezaré a contarles desde el principio.