Secuestro || Stony ||

Capítulo 4

TE CONOZCO.

Steve miro un poco sonrojado al castaño, ¿En verdad le dijo guapo? Cada segundo que lo pensaba más, más se le aceleraba el pulso y sus mejillas cada vez estaban un poco más rojas.

Tony obviamente noto esto, le pareció algo sumamente tierno y agradable. Tanto que inconcientemente esbozo una pequeña sonrisa.

Ambos volvieron a perderse en los ojos del otro. Podrían quedarse así por siempre, lastima, por las circunstancias en las que se encontraban.

Tony analizó bien el rostro del rubio. Defensivamente lo había visto antes. Por desgracia no recordaba en donde.

Ambos tuvieron que dejar de mirarse cuando Sam llegó a la sala.

De solo verlo todos se hecharon a reír, Tony se mordió el labio para evitar soltar una carcajada, Steve también quería reírse pero debía permanecer serio en cuanto a la situación.

Sam llegó con una espátula como "arma" y el casco de fútbol americano (Probablemente de Bucky) puesto para evitar que algo le sucediera a bonita carita.

-Cap, por favor no me mates ¡A mí también me secuestraron! ¡Me sacaron de mi cama! -Steve dió un paso hacia delante para acercarse a Sam pero este se escondió detrás del sofá. -Pe-pero pues al final no te dije porque, pues.. tienes que decirselo.

Tony estaba que soltaba carcajadas. Claramente eran los peores secuestradores de la historia. De razón su "Capitán" estaba molesto.

Capitán.. él era su capitán. Tenía cuántas pendientes con ese miserable, pero hermoso, hombre.

"¡Concéntrate Anthony! No pienses en estupideces.. estupideces que son ciertas, ¡pero aún así no!"

-Bueno me encanta su tonta escenita, pero por si se les olvida ¡yo estoy secuestrado! -Miro a Steve. -¿Por qué me mandaste secuestrar? ¿Qué quieres, matarme o dinero?

Steve se sorprendió por la pregunta. ¿Él mandarlo a secuestrar? ¡Jamás! Es más, estaba pensando en no verlo más, cosa que sería lo más difícil pues el millonario siempre estaba presente a donde fuera.

Una revista, el periódico, la torre Stark por la que tenía que pasar todos los días en frente para llegar a sus entrenamientos. O solo por que quería ver algo del castaño.

Estaba más que enamorado de Tony, aunque le costó aceptarlo ya no hay forma de hacer que ese sentimiento desapareciera.

-Y-yo no te mandé secuestrar, enserio. -Tartamudeaba, ¿pero como no hacerlo? Lo estaban acusando de secuestrar a alguien.

-¡Mientes! ¡Eres su líder y les pediste que me secuestraran! Ya dime, ¿Para qué me trajeron aquí?

Hubo un pequeño silencio, Natasha dudaba si decir que era para que su amigo por fin le confesara su amor.

Pero Clint como siempre tenía que dar sus comentarios.

-Te trajimos porque queremos Yaoi. -Tony lo miro sin entender. ¿Que diablos es Yaoi? ¿Con que clase de locos estaba? -Stony por siempre.

-¡Ahg, eso no tiene sentido! ¡¿Qué quieres de mí?! -Tony se estaba empezando a enfadar. Miraba a Steve con suma molestia.

-Yo.. ¡Yo no le pedí que te secuestraran! ¡De verdad, te juro que no, Tony!

Él castaño sintió un escalofrío recorrer su espina dorsal.

Su memoria volvió a él. Solo había sentido esa extraña sensación una vez.

La misma voz, los mismo ignotizantes ojos azules, esa misma sensación al pronunciar su nombre que solo el podía provocar.

Steve Rogers.. Era él..

Claro, ahora todo cuadraba, por eso le hacía tan conocido. Miro a Sam que todavía tenía el casco puesto, si definitivamente era Steve Rogers, el que lo mando a secuestrar.

Si, claro, es Tony Stark. Él no cambiaría de opinión, ¡Steve Rogers lo mando secuestrar y punto!

-Un momento.. Steve, Steve, ¿Por qué me mandaste secuestrar?

Al rubio casi le da un infarto. Esperaba que el alcohol en el sistema Stark estuviera a su favor, no, eso no era así.

Aunque el infarto también podría ser porque el hombre que lo tiene suspirando lo reconoció. Esta igual o peor que primera vez que ambos hablaron.

Pero Tony no se quedaba atrás, igual que la primera vez, Steve lo estaba enloqueciendo. Tan atractivo como siempre, no podía aceptar que amaba esos ojos zafiro. Era demasiado orgulloso para eso. Pero le gustaban tanto esos hermosos ojos... Azules.. hermosos..

"¡No, Anthony! ¡Te prohibo pensar en esas cosas! ¡El te mando secuestrar!"

-Te repito, yo no les pedí que lo hicieran..

-Si, claro. Que te quede claro, ¡Esos hermosos ojos azules no me covenseran de que no me mandaste secuestrar! -Mierda..

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-🍭Paulis🍭