Amarte Duele [Pausada]

12

-¡Reyes están son las chicas que nos vendieron como esclavas!-dijo el soldado.
Pasaron a las cincuenta muchachas que estaban ahí, y les quitaron los sacos a cada una,morenas,blancas,morochas,delgadas,de peso regular,altas,bajas,estatura media,ojos azules,ojos verdes,ojos grises,pero ninguna con una cicatriz de quemadura en el rostro, Arren se rendía conforme más veía,deseaba ver a Rosa, en cambió Serge las analizaba a una por una y luego les quitaba el lazo que las ataba,para sonreirles.
-¡Serge!-grito impresionado Arren.
-¿Si?-dijo aturdido por su hermano.
Vio a la persona más hermosa que pudiese haber,de ojos azules,cabellos rubios casi dorados con caireles, labios rosados y piel blanca.
-¡Serge es un hombre!-grito Arren dirigiéndose al chico que había impresionado a Serge.-¡¿Soldados?!
-¿Su Majestad?
-¿Por qué trajeron a una chico en vez de una mujer?
-Perdonenos pues pensamos que era una muchacha.
-¿Donde se lo vendieron?
-En el límite entre Alejandrita y Diamante.
Serge se acercó a el chico lo miro con gran curiosidad, al ver este que el rey de Aguamarina lo miraba aparto su cabeza groseramente, Arren se enojó pero los mirada de Serge se hizo más compasiva.
-¡Soldados ya saben que hace!-proclamó Arren.
-¿Y qué hacemos con el?-pregunto el soldado por el chico.
-Llevenlo a mi castillo.-dijo Serge sorprendiendo a todos.
-¡Pero Ser...-quiso protestar Arren.
-¡Nada, dentro del dinero del reino y su destino en total mi decisión sobre el me pertenece!-dijo firme Serge.
-Si.

-¡Ya hemos llegado!-grito Marco.
Ante ellos estaba una ciudad hermosa que deslumbraba ante ellos, como manantial en medio del desierto,pues era un reino seco pero con orillas del mar. Al llegar se apartaron un lugar dentro de una posada pequeña.
-¡Si yo fuera ustedes cubriría a las linda señoritas que tienen ahí!-dijo un mesero de la posada refiriendo a Lucita y Marco.
-¡¿Por que?!-pregunto Rita.
-Es muy común que se roben a las jovencitas extranjeras y más si las ven con ropas tan descubiertas.
Salieron en busca de alguno de los elegidos,pero no era muy cómodo,o por lo menos para Lucita.
-¡¿Por que parece que pertenezco a Islam y, tu y Gilbert están vestidos de Aladin?!-dijo molesta Lucita.
-¡Porque tu escuchaste al posadero,se roban a las extranjeras y en resumen tu eres una extranjera!-le respondío Rita.
-¡Pero tú también eres mujer!
-¡Se supone que Marcó es un ricachón,tu su esposa y nosotros sus sobrinos!-dijo Eliot.
-¡¿Por que yo no me puedo disfrazar de chico?!
-¡Porque no!-dijeron a coro los tres.
Caminaban por ahí buscando indicios de el gremio pero nada, sin querer llegaron a parar al mercado, caminaban oyendo la oferta de los mercaderes cuando Rita miro a su derecha.
-¡Eres una inútil!-dijo el hombre y golpeó a una niña.
A Rita le hirvio la sangre, se alejó perdiendo a sus amigos y corrió hacía el hombre y le soltó un puñetazo.
-¡Que te pasa idiota!-grito el hombre.
-¡A una mujer no se les trata así,y menos a una niña maldito cobarde!
-¡No sirve por eso la golpee,se la devolveré a sus padres por estúpida!
-¡No te lo voy a permitir!
-¡Bien pues toma!-dijo sacando su espada y dando un corte en la mejilla de Rita.
Ella sacó su espada y comenzó a pelear,mientras tanto Eliot,Marco y Lucita luchaban contra la corriente de las personas que corrían hacia su lado contrario.
-¿Qué esta pasando por haya?-pregunto Eliot.
Marco vio una mercader vendiendo mucho a causa del alboroto.
-¡Hola buen hombre,dígame,¿por qué tanto alboroto?!-preguntó Marco.
-¡Bueno un extranjero esta librando una batalla con el sobrino del rey Ala!
-¡¿Que tonto haría eso?!-dijo chistoso Marco.
De repente un hombre comenzó a gritar por todos lados:"¡ES UNA MUJER,ES UNA MUJER, EL CONTRINCANTE DEL SEÑOR AFTA ES UNA MUJER!". Eliot y Marco se miraron entre sí, corrieron hacía el montón de gente y vieron como Rita amenazaba al hombre con su espada, su camisa la habían roto y le resaltaban un tanto el busto. Eliot a visto un grupo de soldados y se metió entre las personas jaló a Rita y corrieron hacia las calles del reino empujando y tirando cosas, en un momento sin saberlo ya se encontraban saltando en los tejados de la casas,sin embargo llegaron a una casa sin salida rápida,y ahí fueron atrapados.
-¡El rey Ala estará muy complacido con estas dos sucias ratas!-dijo uno.
Rita y Eliot sacaron sus espadas para pelear por lo menos con quince hombres cuando desde una azotea se oyó:"¡Fuera abajo!". Ante la advertencia se hicieron para atrás y les cayó a los soldados un barril completo de vino,luego una soga les fue tirada y rápidamente subieron, su salvadora era nada más ni nada menos que una mujer muy bella,de ojos azules, labios rosados,y cabello negro,ella los jalo y los metió a una casa que parecía en derrumbe. Paso más de una hora para cuando la mujer por fin les hablo.
-¡Tienen suerte de que estuviera ahí, fue muy peligroso luchar con el sobrino del rey!
-¡¿Era sobrino del rey?!-pregunto Rita.
-¡Aja!,¿están solos?
-No,otros dos amigos viene por aquí.
-¡Que fuerza tienes para tirar un sólo barril de vino tu sola!-halago Eliot a la chica.
-¡No fue uno sino tres!-dijo presumiendo su fuerza.-Por cierto,¿como se llaman?
-Ella es Rita, y yo soy Gilbert, ¿y tu?
-Me llamó August, también soy extranjero.
-¿August?
-¡Eres un hombre!-dijo sobresaltada Rita.
-Si,y tu una mujer.
En la memoria de Eliot se le reproducido la profecía, en especial la descripción del cuarto releído:
-"un hombre de gran fuerza que renuncio a su masculinidad por amor"-citó casi para el Eliot.
-¿Mande?
-¡Tu perteneces al gremio de la rosa de los cuatro puntos cardinales!-le dijo Eliot asustandolo.
-¡Claro que no!-se negó nervioso.
-¡Si!
-¡No!
-¡Si!
-¡Nos puedes llevar con Nohely!-dijo al fin Rita terminando la discusión.
-¡Si!
August fue y recogió sus cosas junto a Marco y Lucita, en la noche los llevó entre las calles y llegaron a una zona pobre, en una casi que parecía se iba a derrumbar entraron los cinco, August movió un monto de escombros de una y dejó ver una entrada secreta,ellos bajaron sigilosamente y encontraron otras diez personas más cenando.
-¡Quien son ustedes!-dijo uno de los chicos más grandes de ahí.
-¡Calmate Chandler son amigos de Nohely!
-grito desde arriba August.
Una mujer iba entrando desde la otra habitación y sonrió al ver a Rita.
-¡Hola Rita!-dijo en saludo.