You're Perfect [Kellic]

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—Kellin, ¿puedes bajar?— escuché la voz de mi padre gritándome desde la planta baja—.

Suspiré levemente y me levanté de mi cama con toda la pereza del mundo, me puse mis tenis rápidamente y bajé las escaleras con toda la calma del mundo, como si pudiera hacer que el tiempo vaya más lento.

Cuando llegué a la sala mis padres estaban sentados en los dos sofás que tenemos, claro, cada uno estaba en uno diferente.

—Siéntate cariño— dijo mi mamá con una sonrisa—.

—¿Qué pasa?— pregunté mientras caminaba hacia el sillón, el cual estaba en medio de ambos—.

—Tu padre y yo queremos hablar contigo- contestó de nuevo mi madre—.

—¿De qué?

Ambos voltearon a verse, lo cual fue muy raro, ya que últimamente no podían ni siquiera verse sin gritarse de inmediato; así que supuse que era muy serio o muy importante lo que tendrían que decirme.

De repente empecé a ponerme nervioso, no sé porque, supuse que ya sabían que su hijo estaba volviéndose anoréxico. Aunque bueno, era algo que tendrían que saber, tarde o temprano empezarían a notar mi falta de ingerir alimentos, o mi ausencia en "las cenas familiares".

Así que, antes de que pudieran decir algo, me decidí a confirmarles lo que fueran a decir, aunque exactamente ni siquiera yo sabía que me dirían.

Suspiré levemente para darme un poco de valor, moví mis dedos nerviosamente y luego aclaré mi voz, haciéndolos salir de su trance de miradas.

—Soy anoréxico

—Nosotros decidiremos con quien te quedas.

Los tres hablamos al mismo tiempo.

Y realmente tanto yo como ellos no esperábamos escuchar lo que escuchamos.

—¿Qué?— pregunté entre enojado e indignado—.

—¿Tienes el valor de reclamarnos?— preguntó mi papá viéndome con un poco de desagrado— ¿Qué es lo que te pasa?

—¿Cómo se atreven a decidir por mí?

—Pues si no lo hacemos, ve cómo terminas— dijo mi papá alzando la voz—.

—¡¿Y acaso crees que yo quiero ser así?!

—¿Pues porque no lo serías?— preguntó mi papá— ¿Crees que haciéndote el gracioso volveremos a ser una familia normal?, ¿acaso crees que llamando la atención te querremos de nuevo?

—¡Déjalo en paz!— gritó mi mamá parándose de inmediato— ¡No te atrevas a volver a decirle algo!

—¡Si les dije lo que pasa es porque necesito ayuda!— grite frustrado, haciendo que se callaran— ¡Por favor!, ¡¿podrían dejar de pelearse por una vez y ponerme atención?!

—¡¿Por eso lo haces?!— gritó mi padre mientras volteaba a verme con la mirada desorbitada— ¡¿Para llamar nuestra atención?!

—No realmente...— susurré con la mirada baja— Yo....

—¡Pues no funcionó!— volvió a gritar mi padre— ¡Me das asco y pena! ¡Y tan sólo pensar que luchaba por mantenerte...!

No pude escuchar nada más, simplemente me paré del sillón y comencé a correr hacia la salida, ignorando los gritos de mi padre de que me detuviera y lo escuchara. También ignoré los gritos de mi mamá mientras se peleaba con mi padre por haberme dicho algo así y también rogándome que me detuviera.