You're Perfect [Kellic]

f

Lo que pasó el resto de la semana, realmente no fue muy interesante.

Vic mandó su auto al taller, por lo que le propuse que podía venir con nosotros a la escuela, claramente me rechazó.

Podría decirse que seguía molesto por el hecho de que no le dije nada para que me acompañara al psicólogo, y también estaba molesto con Justin por atreverse a hacerme trenzas en el cabello, según Vic, eso sólo era entre nosotros.

Además de que, me había estado evitando todo el tiempo, le dejaba notas pegadas en la ventana, pero nunca las contestó, además de que siempre que estaba fuera de su casa esperando a que me abriera, jamás lo hacía.

Respecto a mi alimentación, el psicólogo me había recomendado comer cosas que fueran de mi agrado y que fueran ligeras, pero realmente me era muy difícil comer.
Ya le había contado a los chicos acerca de esto, y lo que me hizo feliz, fue que no lo tomaron a mal, ni siquiera me vieron mal o me vieron raro, simplemente asintieron comprensivos, e incluso, a la hora de los descansos en la escuela, siempre están vigilando que al menos le de una mordida a la manzana que siempre suelo llevar. Realmente es muy lindo de su parte, pero no puedo evitar sentirme triste al darme cuenta de que Vic ya no se preocupaba porque comiera.

Hoy era Viernes, último día de la semana, el día que todos esperamos con ansias

Hoy me darían mi primera paga, además de que hoy tendría todas las clases con Vic, así que tenía más posibilidades de hablar con él y pedirle disculpas por milésima vez.

—¡Hola Kells!— saludó Justin amistosamente— ¿Listo?

Asentí con una sonrisa y me subí a la bicicleta con Gabe.

Esto de irnos todas las mañanas juntos, se me estaba haciendo costumbre, pero no me molestaba para nada, era lindo tener a personas con quienes platicar en todo el camino a la escuela.

Adiós autobús y adiós soledad mañanera.

Cuando llegué a la escuela, me bajé corriendo de la bicicleta, me disculpé con los chicos y entré corriendo a la escuela con el objetivo de buscar a Vic y no despegarme de él en todo el día hasta que me perdone.

Lo busqué con la mirada y lo encontré guardando algunas cosas en su casillero y guardando otras en su mochila, me acerqué con paso apresurado y me recargue en el casillero de al lado, esperando a que volteara a verme.

—Hey— saludé amistosamente—.

Vic nada más movió su cabeza a modo de saludo, realmente se veía mal, pero intente restarle importancia a su aspecto y a su claro mal humor.

—¿Cómo estás?— pregunté intentando sacar conversación—.

Vic me vio con una ceja enarcada para luego cerrar su casillero y darse la media vuelta, dispuesto a irse, pero lo tome de la muñeca para detenerlo.

Pude escuchar que bufaba un poco irritado por eso, pero aún así, se volteó hacia a mí.

—¿Podemos hablar?—pregunté con súplica— Por favor.

—Ya hablamos mucho, ¿no crees?— preguntó desinteresado—.

—Si pero...

—Tengo que irme, Kellin— dijo Vic soltándose de mi agarre—.

—¿Qué?— pregunté confundido— ¿A dónde?

—A cualquier lugar donde no estés.

Sin dejarme decir otra cosa, caminó rápidamente hacia la salida de la escuela, empujando la puerta con fuerza y llamando la atención de todos los que pasaban por ahí.