Capítulo 26✅

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Todos trataron de avanzar a Samantha que cayó de rodillas al piso, dos balas incrustadas en su cuerpo por esa personas que nunca hubiera imaginado, ni nadie.

Dylan O'Connor sostenía el arma, apuntaba con decisión la cabeza de su hija y cuando estuvo a punto de jalar el gatillo Edward se le tiro encima, el arma llego a los pies de Daniel que de inmediato la tomo.

-¡Es tu hija a quien estas matando! -sujetaron a Edward antes de que lo golpeara y lo colocaron de nuevo en su lugar -¡es tu hija, imbécil!

Samantha miro su mano, estaba perdiendo mucha sangre sin contar que esas heridas dolían más que cualquier otra, ¿la explicación?, disparadas por su padre. Trato de levantarse pero su vista estaba fallando y se obligo a no perder la conciencia. No era el momento correcto.

Eres un monstruo, se repitió, y ellos no mueren hasta el final.

Sebastián no podía apartar la mirada de su hermana, quería ayudarla, ¡jodidamente que si!. Se había prometido que no dejaría que esa visión se hiciera realidad y junto cuando el momento para evitarlo llego su cuerpo no respondió. Se quedo inmóvil viendo como le disparaba y está caía destrozada.

-Tuviste una oportunidad, Dylan -Daniel volvió para apuntarle -ahora yo tengo la mía

Paso lo que menos pensarían, Samantha logro levantarse y se interpuso entre el arma y el cuerpo de su padre. Lo amaba, apesar de todo seguía siendo su padre. Dylan se sintió como una mierda en ese momento, su hija, su pequeña estaba impidiendo su muerte.

-Quitate -ordeno Daniel con la mandíbula apretada

-Ya no sigo tus ordenes, no más -sentía magnifico decir aquello en voz alta y sintió como su cuerpo descanso, a un de esa manera su voz estaba apagada y rota

-¿Seguirás protegiendo a esta mierda? -cuando no obtuvo la respuesta esperada bajo el arma -es una lastima que te tacharan como traidora -sonrió amargamente -jodidamente equivocados de persona

Nadie entendió la referencia, ni el por qué de aquella estúpida sonrisa suya. No fue hasta que todo paso, Samantha miro a su lado izquierdo donde el cuerpo de Jenny se impacto contra el suyo asotandola en una de las mesas.

Con fuerza apretaba su cuello sin pudor, introdujo sus dedos en la herida de su abdomen sintiendolos mojados por la sangre. Un grito desgarrador broto de la boca de Samantha, su ojos lagrimeando por la sensación tan horrorosa y desesperante al mismo tiempo que quería gritar un alto "¡por favor!" para que por una vez tuvieran piedad por ella.

Hanna dio una señal a Adam que se encontraba a su costado, este asintió y golpeo al hombre que la apuntaba, esta provecho para correr donde su hermana y al saltar, con su rodilla, alejo a Jenny del cuerpo lastimado de su hermana.

-Te lo advertí, perra -Hanna azoto su puño contra el rostro de Jenny un par de veces disfrutando tanto la sensación, estrello su cara contra la mesa y ahí la inmovilizó

Samantha por su parte seguía en la misma posición, encima de aquella mesa mirando un punto fijo, su abdomen ardía como mil infiernos, al mismo tiempo que sus ojos pesaban como dos rocas. Un pequeño quejido salio de su boca, quería cerrar los ojos y descansar sin importar nada. Pero esperaría por ella, lo cual no duro mucho.

-Mamá -susurro Adam llamando la atención de todos que hasta ese momento se había permanecido en una moribunda Samantha

Si antes estaban sorprendidos ahora estaban apunto de sufrir un colapso nervioso, frente a ellos, de pie, con la mirada en el suelo estaba Emma, o eso creían. Una risa ronca salio de ella, Adam dio un paso atrás asustado por esa reacción de su madre. Levanto la vista mostrando unos grandes ojos rojos, cuchillos de la cocina aparecieron detrás de ella mientras se acercaban a un Adam en shock. Cuando uno de los tantos cuchillos estuvo apunto de atravesar la cabeza de Adam, este se desintegro.

Traición [Trilogía T. 1] ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora