Miénteme pero Ámame- TERMINADA

Retraso

-Es la tercera vez que sales de este baño- dijo Marisa examinando mi aspecto.

Debía lucir como un monstruo verde, esta mañana no me sentía del todo bien las náuseas eran horribles pero quise venir al trabajo a pesar de ellas. Ahora sabía que fue mala idea nada más llegue al spa y fui directa al baño donde vomite. Era la tercera vez que lo hacía y esperaba fuera la última.

-Creo que tengo bichos o algo-conteste caminando por el pasillo rumbo a la sala de empleados.

-Un bicho que sale en 9 meses- dijo ella riendo.

¿Embarazo?

Si ya lucia mal después de ese pensamiento perdí todo color. No, no, no es imposible además tuve mi periodo el día...

Mierda

Saque mi móvil rápidamente directa a mi calendario.

Doble Mierda

Mi periodo tenía que llegar hace dos semanas.

¡Dios no!

Es imposible yo tomó la pastilla anticonceptiva.

A veces fallan estúpida.

-Ángela dime que no estas embarazada-hablo Marisa con cara de preocupación.

-No lo se tengo uuuuun.....pe.pequeño retraso.

-Define pequeño.

-Dos semanas- solté la bomba.

-No jodas-ella lucia asombrada-tienes que salir de aquí ahora mismo y realízate un test.

No moví ni un solo músculo, estaba cagada de miedo. No podía ni respirar y si sale positivo. El bebé no es de Oliver las fechas no coinciden y él sabrá lo de Dan.

Nos jodemos

¿Por qué ahora que estamos juntos?

-Vamos -Marisa me tomo de la mano, ayudándome a caminar tome mi bolso.

Seguía en shock, ¿un bebé? No, imposible, tal vez sólo es un retraso de esos que dan por estrés o desnutrición.

Ja, ja,ja querida no te engañes.

- ¡Eres un maldito ladrón!-los gritos de Leo me distrajeron de mis pensamientos.

Me detuve al igual que Marisa, estábamos en medio de Seiken justo donde iniciaba el área del Gym.

El sonido de gritos de chicas y cosas cayendo nos hicieron corren para ver que sucedía.

Un círculo de chicas gritando nos impedía ver que estaba pasando en el centro, hice a un lado a una de ellas para pasar.

Entonces vi el espectáculo, Leo tenia sometido a Daniel que luchaba por sacarse de encima al musculoso hombre.

-¡¡Déjame cabrón!!-dijo Dan- yo no robe nada.

¿Robo? Mire a Marisa ella estaba igual de sorprendida que yo, al parecer no tenia ni idea de lo que Daniel hablaba.

-El verdadero culpable duerme en tú cama.

Jodido Daniel culpar a Marisa era un golpe bajo.

-Con mi mujer no te metas pendejo-hablo el muy enojado Leo, Daniel grito de dolor por la llave que le estaba aplicando.

Al parecer el grito de Daniel hizo que Marisa reaccionará, fue directa a Leo le dijo algo al oído a éste entonces aflojó su agarre.

Daniel le había robado a Leo, increíble y que idiota robarle a Leo que es un obsesionado de las finanzas.