Capitulo 18

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Anahi.

Logre calmar mi manojo de nervios, la rabia y tristeza. En estos momentos no podia permitir que mi sentimientos me ganaran, tenia que pensar con la cabeza fria. Los hombres que trabajaban con papá estaban en casa, esperando a que dieran la respuesta de quien se habia llevados mis hermanos. Todo, apuntaba a Manuel, decian que no porque el no se encuentra en el pais, pero eso no quiere decir que no participara en esto.

- Señor, lo llaman - le pasaron el telefono a papá y atendio, se que tenia miedo aunque no lo demostraran.

- Quiero hablar con Anahi - la voz se escuchaba distorcionada.

Anahi: ¿Donde estan mis hermanos? ¿Que quieres? ¿Dinero?.

- Te quiero a ti, te dare la direccion y llegaras hoy. Si no estas, mañana mismo tendras a mis hermanos en tu casa pero con una bala en la cabeza.

Termine aceptando aunque eso provocara en mi familia una ola decepcion hacia a mi. No me interesaba, mis hermanos estaban primeros para mi. Me encerre con papá, al final del dia solo el y yo nos entendiamos. Y asi evitariamos un poco el drama de la familia.

Enrique: Sabes cuales son las condiciones en la que iras... por años te enseñe a defenderte y ya sabes manejar cualquier tipo de armas.

Anahi: Lo se, papá. Solo que tengo miedo... ¿Crees que sera Manuel? ¿Y si es su padre?

Enrique: Estare siempre junto a ti, hija - me dio un beso en la frente y luego me abrazo como lo hacia cuando estaba pequeña - No dejare que ninguno de ellos dos te toquen. ¿Entendido?.

Anahi: Entendido papá.

Subi a mi antigua habitacion para cambiarme, no podia ir en vestido. Me coloque un jeans ragado, una simple camisa con una chaqueta encima y mis gomas. Amarre mi cabello con una coleta alta y baje a donde todos me esperaban. Alfonso estaba molesto y habia salido de la casa para respirar, no podia culparlo, si la situacion fuera al reves yo estaria mucho peor.

Me entregaron mi audifono invisible y un pequeño microfono que se enganchaba a mi sosten, la unica manera que tendrian ellos para saber donde estaba yo. Papá me entrego un arma y encajaba perfecto en la cinturilla del pantalon y no se tonaba tanto. Aunque no quisiera, mis nervios si estaban a flor de piel. Por una parte, pensaba lo peor que podia pasar y esa seria yo muerta. Y lo mejor era que mis hermanos regresaran a casa, pero tambien podia terminar yo muerta.

Me acerque silenciosamente a Alfonso y lo abrace por atras, respondia a mi abrazo pero no dijo nada. Estaba tenso y su cara no expresaba nada. Se que estaba molesto, pero el tambien tenia que entenderme. Si fueran sus hermanos quienes estuvieran en este peligro, el haria algo asi, creo.

Anahi: Nene, volvere con vida..- le susurre en el odio.

Alfonso: ¡Eso es lo que no sabes, Anahi! No sabes a quien te estan enfrentando, no sabes con quien vas a lidiar.

Anahi: Por tiempo he entrenado, me se defender Alfonso.

Alfonso: Te amo - solto- Pero no puedo verte partir, no puedo ver como la mujer que sera mi esposa se va a la boca del lobo para que le maten.

Anahi: Yo tambien te amo, cariño.

Le di un beso en la cabeza y me voltee para irme. El seguia ahi sentado, se cuanto le afectaba y no podia obligarme a algo mas. Le di muchos besos a mi sobrino y le prometi que su tia volveria. Me despedi de mama, mi hermana y mi cuñado, como si no fuera a volver. Pero se que si... creo que si volvere. Papá me acompañaria hasta la direccion pero no se alejaria tanto de mi. Por si tenia que actuar.

• El Amor • (2T. COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora