Estaba en blanco, no sabía que responder.
Por favor que alguien me ayude, por favor, rogaba en mi mente mientras veía como el profesor me miraba con rostro de pocos amigos.
— ¿Y señorita Kidman? — me pregunta el señor Morrison.
Se me había olvidado todo de mi exposición, algunas veces me sucedía eso, estudiaba tanto que al final me iba mal.
— Mierda — susurro aún rogando en mi mente.
— Puede sentar.. — es interrumpido por golpes en la puerta.
Inmediatamente todas las miradas se desvían hacia la persona que había tocado, ahora sentía alivio en mis hombros al no tener toda la atención.
— Si Señor Davis — el maestro lo miraba aburrido a Marcus.
— Oh sólo quería recordarles a sus alumnos que como se acerca el día de la amistad quería saber quiénes participarían este año en las apuestas — expresa con voz formal.
Observo por un momento como las chicas se derretian por él, al igual que yo. Aunque eso no era novedad ya lo había notado hace días.
Casi la mitad de la clase va y se hace anotar. Era toda una tradición hacerlo, tú apostabas esa noche por el jugador de fútbol americano que lo haría mejor y si estaba en todo su esplendor, ganabas dinero y tenías la suerte de estar con él (si te escogia) en una cita una noche, claro si eras mujer y vamos la mayoría a las chicas aunque no lo admitieran, si querían estar con alguien del equipo para ser popular. En cambio si eras hombre recibias el dinero y tenias posibilidad de estar en el equipo el año siguiente, estar en el equipo era todo un lujo ya que podías saltarte algunas clases y las chicas se acercaban a ti.
— ¿Y tú Alexis? — Marcus me mira con expresión divertida.
Siento como se quedan callados un momento esperando mi respuesta.
— Tendrá que ser para Hale — respondo mordiendome los labios.
Soy una hija de... porque dije eso, en primer lugar ¿Por qué con Garrett? Tanto pienso en él que inconscientemente digo su nombre.
— Está bien — me guiña y sale.
Siento como mi rostro comienza a enrojecerse, de nuevo sentía las miradas puestas en mí.
— ¿Puedo ir al baño? — le pregunto al señor Morrison.
— Vaya de una vez — seguía con rostro aburrido.
A medio camino me impacto al ver un gran póster colgado en la blanca pared, era Garrett observando el horizonte con su ropa del equipo de futbol americano, se veía extremadamente deseable. Las facciones de su rostro y esa mirada era de lo más enigmático y eso que la foto estaba en blanco y negro, y sólo estaban a color las letras que decían "hazlo posible", si alguien me tomaba una foto desprevenida a mí, estoy bastante segura que no me vería así de bien.
— ¿Te gusta lo que ves? — pregunta alguien a mis espaldas.
No, por suerte no era Garrett, eso sí sería vergonzoso.
— Es una foto muy buena — respondo viendo a mi acompañante.
— Tienes razón, el fotógrafo es muy bueno — Cristoff me miraba con una sonrisa divertida.
— Bueno tengo que volver a clases — dejo de ver la excitante foto para regresar a mi realidad.
— ¿Sabías que eres la primera en verlo? — me giro de inmediato.
— ¿Hale no lo vio?
— No, de todas maneras era para la preparatoria y las imágenes no sólo son de él, están Wesly, Toby, Todd, William y los demás del equipo, es para mantener la llama encendida en el juego.
Eso tenía lógica. Me pregunto si cuando las vea Hale va a estar sorprendido o enojado, desearía poder estar con él cuando haga eso, pero no hablo con él, no desde que lo dejé ese día.
— Eres muy buen fotógrafo y de verdad quisiera verlas todas, pero estoy con Morrison en este momento — él abre los ojos como platos.
— Creo que deberías apurarte a tu clase.
Despues de entrar apurada al baño, salgo corriendo del mismo y así llegar antes de que se enoje más, mientras cruzo la puerta el timbre suena, eso significaba que ya había terminado ese período. Llego para recoger mis cosas e ir caminando a mi siguiente clase que era gimnasia.
— Hola hermosas mujeres — veo a Dotie y a Casey saliendo de los vestidores - ¿Qué hacen tan temprano por aquí?
— Salimos antes de Artes — me informa aburrida Casey.
— ¿Por qué están con ese humor?
— ¿Por qué te ves tan pálida hoy? — me responde Dotie.
— Supongo que porque ya no estoy tanto en el sol y ustedes — entre las dos se miran y comienzan a reír.
— Es que estábamos platicando en clase sobre quien la tenía más grande en toda la preparatoria y los enumerabamos cuando íbamos por el número 10 la maestra loca nos escuchó y nos echó de la clase — se encoge de hombros Dotie.
— Vaya — aunque desearía saber como era su dichosa lista, pero tenía que cambiarme.
Veo como las dos se van directo a la cancha mientras yo me meto en los vestidores. Cuando me estoy sacando la camisa y los pantalones escucho como alguien entra, no me asusto para nada, porque vamos son los vestidores para las mujeres y obviamente entran "sólo mujeres".
— ¿Alex?
Una voz masculina me llamaba, intento taparme con mi pequeña toalla pero era imposible, ya hasta había guardado mi ropa en mi casillero y no me daba tiempo de ponerme los shorts y la polera deportiva.
— Alex aquí estás — Tucker pasaba como si nada a mi espacio.
Lo que más me sorprendía era su escultural cuerpo y alto que era, apenas llevaba puesto unos shorts.
— ¡Qué te pasa! ¿¡Qué haces aquí!?
— Vine a reclamarte — me mira mal — ¿Por qué apostaste por el idiota de Hale?
Es en serio tenía que venir a decirme eso ahora.
— Pues si quieres lo cambio por ti, ahora vete — lo empujo.
Me enseña una sonrisa y se acerca para abrazarme.
— Eres tan delgada Alex - me levanta de suelo — y pequeña.
— ¡Hey! Soy alta — me río.
Inmediatamente la puerta se abre de par en par y de ella entra la nueva asistente del entrenador.
— Pequeñas sabandijas — nos mira con los ojos como platos.
Me separo de Wesly e intentar taparme de nuevo, mientras tanto Tucker se reía de la escena que montaba la vieja.
— Sabía que estaban — masculla algo inentendible — ahora se la van a ver con el entrenador.
Nos jala a los dos del brazo para llevarnos a la oficina.
— No tengo mi ropa puesta — le digo a la mujer.
— Eso deberías haber pensado antes de estar de promiscua — me vuelve a jalar del brazo.
Tapo mi rostro como puedo para pasar el camino de la vergüenza, todos los estudiantes nos miraban, algunos hasta sacaban fotos, Wesly se sentía de lo más orgulloso.
— ¿Es en serio Wesly? — lo fulmino con la mirada.
— Sólo disfrútalo — me guiña un ojo.
No sé que es peor, que me hayan encontrado con Tucker o que toda la preparatoria se entere y saquen fotos.
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Alex: el nombre de la mala suerte/ Completa
Fiksi RemajaAlex podría ser el nombre menos llamativo que podrías imaginar, quizás mis padres esperaban que seamos tres hombres que cuidan la casa, no una chica que parece y se comporta como uno. Si quieres puedes decir que es la típica historia de chica super...