||Capítulo 6: Oportunidad||

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-Bienvenidos, ¿puedo atender su orden? -Sonrió mientras miraba a aquella familia. Un hombre y dos pequeños.

-Oh, venimos por el nuevo platillo, hemos escuchado acerca de que está delicioso.

-Pues tienen unos oídos increíbles, el cocinero que lo preparó lo hace con toda la dedicación y los mejores ingredientes del mundo. -Elogió a su amigo Tatch, pues el restaurante había tenido más visitas desde que el nuevo platillo se dio a conocer.

Portgas D. Ace, trabajaba en un restaurante, uno de los más conocidos de la ciudad, el restaurante "Moby Dick". Consiguió el empleo cuando abandonó la escuela y desde entonces iba ahí todas las tardes y parte de la noche.

El pecoso se dirigió a la cocina, luego de haber atendido unas cuantas mesas más.

-Tatch, tres órdenes del platillo "Fénix", dos arroces, seis postres dulces de piña y fresa y... Es todo. Cuando termines vengo a buscarlos. -Dictó en voz alta lo que había anotado en su pequeña libreta.

El mencionado sólo asintió y comenzó a repetir los pedidos a los encargados.

Ace disfrutaba pasar el tiempo ahí, todos los que conocía eran sus amigos, hasta podía considerarlos familia, pues eran muy buenos con él y con sus hermanos.

Sabo...

-Ace, atiende a la mesa 10 -Su mejor amigo le tocó el hombro.

-Oh, sí.

Dicho esto se dirigió a esta, no podía distraerse.

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Terminada ya la jornada de trabajo, todos los empleados se quitaban el uniforme para ir a sus casas, la temporada de lluvia seguía, por lo que varios llevaban su paraguas, no siendo excepción de nuestro azabache.

-Hoy fue un día muy ajetreado -Escuchó como se quejaba el de tupé.

-Sí, pero eso es bueno, ¿no crees? Si viene más gente, más ganancia para al Oyaji -Una sonrisa se formó en sus labios.

-Si, pero eso no quita que es agotador -Se quejó.

-Ja, ja, ja, por más agotado que estuvieras, no le quitabas los ojos de encima a Mar-

Sintió una mirada amenazante a su lado y sólo pudo reír con fuerza.

-Okey, okey, vamos, que tu amado nos espera -Burló de nuevo.

Como había dicho, al salir y cerrar el local, el rubio los esperaba con su paraguas abierto, pues había comenzado a llover desde hace unos minutos.

Comenzaron a caminar directo a sus casas, tomaban el mismo camino hasta que se comenzaban a separar para dirigirse a su hogar.

-Bueno, me separo de ustedes hasta aquí -Se despidió el cocinero, con una sonrisa y dio la vuelta.

-Adiós. -Dijo con simpleza el cabeza de piña.

-Nos vemos mañana.

Después de ello siguieron su camino, en silencio, la lluvia comenzaba a volverse más fuerte y no faltaba mucho para que tomara su propio camino.

-Oye, Ace -Escuchó como lo llamaba de repente.

-¿Umm?

-Yo quería... Preguntarte si quisieras salir conmigo mañana. Es nuestro día libre y pensé que... Estaría bien que saliéramos -Balbuceó un poco, le ponía tan nervioso estar junto al pecoso.

-Oh, claro, Marco. ¿Vendrá Tatch o Izou? -Preguntó emocionado. Hacía bastante tiempo que no salía con su mejor amigo.

-No, ellos... Están ocupados... Me refería a solo tú y yo...

"Relación a distancia." [Sabo x Ace] (One Piece)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora