¿Alguna vez se han sentido tan perdidos, pero en un lugar feliz? ¿Alguna vez han estado tan seguro de sus decisiones que eso mismo te hace cuestionarlas? ¿Alguna vez se han sentido tan felices que dudan de que sea real? Díganme, ¿Alguna vez se han sentido tan perdidos, aunque sepan en dónde están?
Es como estar seguros a donde vamos, pero el camino es tan distinto, diferente a lo que esperábamos, desconocido, irreconocible, sin ser capaces de decir "Ya estuve aquí.". Es como esa sensación de saber a donde vamos, con total seguridad, y entonces de repente te das cuenta que el camino es también lo que importa, a veces me detengo y ni siquiera estoy a mitad del camino, la tormenta me va alcanzando, e intento huir de ella, pero no me doy cuenta que necesito atravesarla primero, y dejar de huir de ella, y es cuando busco refugio o podría morir. Aún así, me quedo para recibir la tormenta, es lo que me dice mi corazón, aunque salga lastimado de él. La tormenta se va, y sigo mi camino, dañado, cruzar y doblar por tantas calles, subidas y bajadas, a veces me hacen dudar a dónde voy, o qué tanto me falta para llegar, es esa sensación de inquietud, de que algo me persigue, que debo apresurarme, pero a la vez es una prueba de mi tolerancia y paciencia, debo aprovechar, porque voy a pie, y tengo muchísimo que caminar, mejor no complicarla con mis pensamientos.
Y es así, cruzar caminos, cambiar, intentar llegar a ese lugar tan especial, y que necesito llegar, para poder decir "Lo logré." Hace años que estoy caminando, y debo seguir. Me he caído, me he sentido impotente, necesito llegar a ese lugar, y valdrá la pena, porque allí me esperan muchísimas cosas, me esperan la felicidad, la verdad, la justicia, la conformidad, la estabilidad, todo, me espera mi lugar feliz, por eso debo seguir caminando, aunque dude, aunque esos susurros me digan que todo esto es un sueño, aunque necesite desistir, aunque empiece a cuestionar si ese lugar existe.
Es como estar en un camino casi interminable, tiene estaciones, y solo estoy con una remera y unos pantalones holgados, y pasar así los meses, con frío o calor, sufriendo dolores y complicaciones, pero sé que valdrá la pena, estos años he crecido, y he aprendido a como resguardarme frente a esos obstáculos, aunque cada año se hagan más difíciles, solo me queda seguir caminando, y seguir caminando.
Ese lugar valdrá la pena.
Solo tengo que seguir, puedo dudar, puedo llorar en el intento, pero en esa palabra estoy viviendo, sigo intentando, sigo tratando, solo me queda dejar que el tiempo pase, ¿Alguna vez sintieron eso? ¿Que lo que podría matarte, te hace sentir vivo? Quizás no, quizás sí, la respuesta que sea, necesito suerte, y la recibo de varias personas, algunas de ellas me están mirando desde ese lugar especial, me motivan, aunque no las vea, me dan las suficientes energías para llegar. Aunque la paciencia no sea una virtud mía, solo me queda esperar, y seguir caminando.
Seguir caminando, cambiando y adaptándome con las estaciones, y las situaciones, es el camino que decidí elegir, el que escogí, y debo decir, que es el más difícil, pero siempre me gustaron los desafíos, pero me arrepiento a veces, y vuelvo a amar este camino.
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Pequeñas Historias
Teen FictionHistorias de todo tipo ~ Adentrate a mi pequeño y reboltoso mundo lleno de amor, dolor, muerte, depresión, felicidad y cólera.