Narra Lula:
Estaba a punto de dar las tres de la mañana. Todos estaban durmiendo, la casa estaba completamente a oscuras.
Una vez más tengo que sacar mi faceta de James Bond y salir cuando todo el mundo duerme y de la manera más sigilosa posible.
3:00 de la mañana, es mi hora.
Recojo mi maleta, me visto, y con los zapatos en la mano, empiezo a andar por el pasillo.
Bajo los escalones de uno en uno, a dos pasos de la puerta, miro a mi derecha, la cocina... Mi barriga ruge. Dejo la maleta en el suelo y echo un sprint hacia la cocina.
Salgo de allí con una manzana entre mis dientes.
-¿A donde vas?.- Giro mi cabeza para ver quien me habla.
-Cariño ¿que haces despierta?.- La niña rubia de pelo rizado baja las escaleras con su peluche bajo el brazo.
-¿Es que no quieres dormir aquí?.- Pregunta la niña. Si ella supiera...
-Em... No... ¿No crees que somos muchos ya en la casa?.- La niña no me quitaba ojo, no entendía el porque me iba, ni yo me iba a parar a explicárselo, mejor que lo haga su querida abuela.
-La abuela me dijo que el Tito iba a traer a una chica a la casa, ¿eres tú?.- Asiento tras escuchar a la niña. Dejo las maletas en el suelo y camino hacia ella.
-Princesita vete a la cama.- La niña ni se inmuta. La cojo en brazos y la llevo hacia su cuarto.
-Cariño, este es nuestro secreto, no le tienes que decir a nadie que he estado aquí contigo ¿vale?.- La niña se tapa la boca y ríe flojito.
-Me gustan los secretos.
-Pues ya tenemos uno tú y yo, no se lo tienes que decir a nadie, y menos al tito, ¿vale mi vida?.- Vuelve a taparse la boca y asentir con todas las ganas del mundo. ¡Que bonita que es la infancia!
Después de seguir sus indicaciones, la dejo en el suelo para que entre en su cama con su madre.
Tras despedirme de ella, vuelvo a bajar las escaleras. Llamo a un taxi para que me recoja y me lleve lejos de aquí.
Narra Pablo:
-Mama, ¿donde esta Lucia?.- Bajé las escaleras de dos en dos.
-No lo se.- Respondió mi madre sumergida en la cocina.
-¡Yo se donde esta!.- Dice mi sobrina mientras juega con sus muñecas.
-¿Y donde esta?.- Me senté en el suelo para quedar a su altura.
-No te lo puedo decir, es nuestro secreto.
-Pero tu y yo no tenemos secretos mi vida.- Mi sobrina niega con la cabeza mientras sigue jugando con sus muñecas.
-Venga, dime donde esta.
-¡Que no te lo puedo decir!.- Coge sus muñecas y sale corriendo para el jardín.
-Mama... Dice Carla que ella sabe donde esta ¿segura que no sabes nada?.- Entro en la cocina en busca de un vaso de agua.
-Cariño, es una niña, lo habrá soñado.
Doy un trago largo, quizás mi madre tuviera razón.
-La llamaré una vez más.
Salgo al jardín con el móvil entre las manos. Muchas preguntas se colapsan en mi cabeza.
Un tono, dos, tres, cuatro... Nada.
Desesperado no sé donde buscar.
Se abren los portones del garaje, mi padre con el resto de mis hermanos y sobrinos acaban de llegar y yo sin encontrar a Lula.
Vuelvo a llamarla, sé que esta escuchando el móvil y eso quizás sea lo que mas me este cabreando.
-Mmmm.
-Como que mmm ¿Donde estas? ¿Estabas durmiendo no?
-Uy demasiadas preguntas me estas haciendo.
-¿Que haces?
-Dormir.
-¿Donde estas?
-Trabajando.
-¿Como?
-¿Preguntas contestadas? ¡Ale!.
Me quedé como un imbécil con la boca abierta escuchando el “pi, pi, pi” Del teléfono.
Lo peor creo que no es saber donde esta, si no, el porque no me ha dicho nada.
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A los que la estais empezando a leer ahora espero que llegueis hasta aquí, subí toda la novela de golpe porque voy a seguir esta novela y la voy a ir subiendo aquí.
Espero que os este gustando, pronto muy pronto habrán más capitulos. Sé muy bien de las idas y venidas de estos dos, pero así son... Espero tener la cabeza más cuerda para continuarla y sobre todo para que os guste.
Gracias a toda a gente que la ha empezado a leer cuando la comence a subir al blog!
Y gracias a los que la estais leyendo desde aquí!
Muchas gracias!
