Nota:
¡Holiwis! Ok, fue muy tonto saludar así... nah mentira. Madurar es para frutas, y yo soy un lapiz (?) Aquí les dejo éste cap, y les quiero desear un feliz día del amigo, aunque fue ayer.... pero neh, mejor tarde que nunca, ¿no? Ojalá que lo hayan pasado bien :D
Bueno, voten y comenten, please. Los quiero :3.
Quedé en encontrarme con Rydel en un café de un centro comercial. Tenía que aclarar mis dudas, aunque todavía estaba algo insegura sobre si debía preguntárselo a la hermana del chico que podría gustarme... Pero como dije antes... yolo, ¿no?
Y yo ya había pedido dos cafés. Y fue cuándo la vi entrar por la puerta, con una inmensa alegría. Me visualizó, ensanchó su sonrisa, y se sentó frente a mi.
-Hola, Rydel. ¿Como estás?-le pregunté. Si, no quería ir al grano todavía. Solo soltaria el tema cuándo fuera el momento perfecto, y listo. Como si no me interesara mucho.
-Bien, me alegra que tu hayas querido invitarme. Pensé que yo tendría que hacerlo, porque Ross me dijo que eras muy tímida. -me contó.
-Tiene razón. Es que quería pasar tiempo con la hermana de mi amigo.-reí levemente. Ella cambió su sonrisa feliz por una pícara.
-Si claro. Son amigos...-sonrió de manera sarcástica, y yo parecía un tomate de lo roja que me puse.
-Eh... yo... él...-empecé, comenzando a sudar ligeramente.
-Tranquila. No me molestaría que tu fueras la novia de mi hermano. Es más eres la chica perfecta para mi hermanito. No quiero a la bitch de Ashley. -dijo.
-Jaja, no me hagas reír. Yo no soy perfecta, si supieras cuántos defectos tengo... -repliqué.
-Bueno... creo que nadie puede ser perfecto, ¿no? Pero mientras seas tu misma, siempre tendrás una oportunidad con mi hermanito.
-Cambiando ligeramente de tema... Hoy mi hermano me habló sobre que parecía que Ross y Ashley eran "novios"-empecé. Ella me escuchaba con atención.-y me gustaría saber si... son celos...
-Interesante... cuéntame que hiciste cuando lo escuchaste.
-Bueno... casi muelo a mi propia almohada a golpes...
-¿Imaginaste que era Ashley?
-Si.
-¿Te comiste las uñas? ¿Nerviosamente?
-Si.
-Son celos, chica.
-¡Noooooooooooooo!-exclame dramáticamente. Todos se me quedaron mirando raro, y Rydel estalló a carcajadas.
Podría ser actriz...
-Ya, ya... no es el fin del mundo estar celosa. -me dijo Rydel, y justo miró por la ventana. Yo también miré, y vi a Ross y Ashley pasar. Inmediatamente sentí una rabia recorrerme, y tomé las servilletas que había en la mesa. Comencé a destrozarlas, imaginando que tenían el rostro de Ashley estampado en ellas.
-¡Muere, puta, muere!-exclamé, dejando todos los trocitos de servilleta esparcidos en la mesa.
-Ok... eso si que son celos, aunque viéndolo desde mi punto de vista, es gracioso y a la vez raro.-en ese momento, se abrió la puerta de la cafetería, revelando a Ross y Ashley. Ross nos vio casi al instante, y vino hacia nosotros, de la mano de la muy bitch. Yo no pude evitar que se formara un nudo en mi garganta.
-¡Hola! ¿Podemos sentarnos aquí?-preguntó el rubio. Rydel asintió rodando los ojos. Y me miró.
-Ey, ¿te sientes bien? Lucía. -pasó una mano delante de mis ojos. Se habían cristalizado, e iba a echarme a llorar en cualquier momento. Estaba segura de eso.
-Estoy bien, solo... solo quiero irme a mi casa.-dije viendo como Ashley me miraba con superioridad, y se sentaba frente a Ross, quién estaba al lado de Rydel.
-Lu... no quiero verte mal, por favor.-pidió ella, con preocupación y tristeza. Hice un esfuerzo gigante por sonreír, aunque aquella sonrisa no fuera verdadera. Me incorporé, me despedí de ella, y salí de la cafetería.
________________________________________________________________________________________________________________________________
No pude evitar recurrir al alivio emocional que me provocaba el cortarme. Puede que ustedes no lo entiendan, pero... lo necesitaba, ¿ok? Esa acción de lastimarme a mi misma... me hacía sentirme mucho mejor... al menos por unos minutos.
Cuándo uno se corta, se preocupa solamente por el dolor físico, y eso hace que se olvide momentáneamente del dolor emocional.
Probablemente me llamen loca, pero ésta es mi vida, yo decido que hacer con ella, yo decido todo en ella, yo decidiré cuando acabar con ella...
Quizás esté siendo muy exagerada, pero me han lastimado emocionalmente tantas veces... que ya no quiero seguir con esto, ¿saben? Ahora dirán que me entienden. No. No todos sufrimos igualmente, no.
Ahora entiendo... que no tengo verdaderos amigos, solo a Ty... y probablemente Rydel...
Y ahora entiendo... que Ross era como todos los demás chicos... solo le importaba el físico.
¿Como pude ser tan imbécil para no darme cuenta de eso? ¿Como pudo gustarme? ¿Habrá sido por su fingida ternura? No lo se...
Me acosté en mi cama, y comencé a llorar... no solo por ese rubio, sino por todo lo que había sufrido... golpes, insultos, dolor, físico y emocional. Más dolor... en eso se basó mi vida.
Algunas veces pienso... que si Sally no hubiera muerto... yo no sería así, sino que sería... normalita. Como las y los demás... Mi vida sería ordinaria.
Por supuesto, nada de lo que me pasaba era culpa de ella. No, no. Era sólo mía, por ser tan débil...
Enseguida me quedé dormida, consumida por las lágrimas.
