- Debo conocerla - Susurró con un toque de interrogación, aunque para él sonó como una afirmación. Al darse cuenta de que ella estaba lo bastante lejos comenzó a seguirla, la veía desesperada. <<¿Tan importante es éste cuaderno?>> pensó preocupado, no la había ni conocido y ya la estaba haciendo sufrir, debía devolverle el cuaderno lo más rápido posible, pero... Realmente no sabía cómo, quizás debía dejárselo en la puerta de la casa y salir corriendo... No, él no podía hacer eso, existía una posibilidad de que el padre ni conociera la existencia de aquel objeto en sus manos, quizás solo debía acercarse y entregárselo, los pensamientos del chico lo distrajeron a tal modo que ni siquiera se había percatado que sus pies habían dejado de correr para tomar un paso más tranquilo, y que su mirada había perdido de vista a la chica, lo que le hizo reprocharse mentalmente el ser tan distraído, y más en situaciones como éstas. Al no encontrarla en los alrededores, al pobre chico lo único que se le ocurrió fue regresar al lugar en el que la había conocido, aquel parque cubierto completamente por una capa blanca provocada por la nieve, tal vez, y solo tal vez, la chica pudiese encontrarse allí, aun en una búsqueda exhaustiva por su preciado cuaderno. Las piernas de JungKook comenzaron a correr el doble de rápido, debía llegar antes que aquella chica, poner el cuaderno en el lugar abandonado anteriormente, y éste sería devuelto a la chica, ¡Sí!, eso es lo que el chico haría, lastima que se perdería de la oportunidad de cruzar palabras con ella, realmente quería conocerla, hablarle y si se daba el caso, darle un poco de amor a esa delicada e inofensiva persona, que hace tan sólo unas horas era completamente inexistente para él, <<Ella entró a mi vida tan repentinamente, ¿Cómo es que me importa lo que sienta?... No lo sé, sólo es un impulso que me atrae cada vez más hacia ella, que me hace querer estar cerca, quizás tenga un nombre, pero ¡No!... Aun a esto no le puedo llamar amor>>, Se decía una y otra vez mentalmente aquel chico, que no había parado de correr por las desoladas calles a causa de la tormenta de nieve que se acercaba.
Después de un rato por fin pudo visualizar el parque, y con un sentimiento de alivio sonrió, se sentía aliviado al saber que "Ella" no sufriría, ni se culparía por haber perdido su "Objeto preciado", mientras caminaba hacia la banca que aun se encontraba lejos, su incontrolable y desordenada mente comenzó nuevamente a divagar, <<¿Por qué es tan importante esto?, son sólo unas hojas juntas, aunque debo admitir que con un contenido exquisito y valioso, pero aun así, es sobre valorado por ella, para la mayoría de las chicas su "objeto más preciado" es algún colgante precioso, que su familia, sus novios o alguien importante para ellas le haya dado, otras prefieren algún lujo que exhiben, restregándole en la cara a los que la rodean el dinero que poseen, otras aman sus carros como el objeto más preciado, entre otras cosas realmente costosas que cuidan y "aman" con el alma... Pero ella... Es total y completamente distinta, ¿Acaso para tí no son importante esos lujos?, Creo que la respuesta es más que obvia, si su "Objeto más preciado" es éste cuaderno, que, a leguas se nota que es decorado y retocado por ella misma>>, Eso le hizo pensar y aclarar aun más que ella era distinta a las chicas rutinarias que se podían ver por la calle, y tenía razón... A aquella chica no le importaban si era bella o no, si tenía lujo o no, si tenía dinero o no... A ella no le importaban ninguna de las cosas materiales que otras personas cuidaban con su propia vida... Lo único que le importaba era ser feliz siendo ella misma, y así era, era feliz, algunas personas que había dejado en el lugar anterior al que vivía, la llamaban "Alma libre", pero ninguno de ellos sabía la verdadera razón por la que optó por ser así, quizás y sólo quizás, aquel chico distraído pero con corazón cálido pueda descubrir el por qué de su personalidad, el por qué de su pensar, el por qué de su sentir, tal vez, el podría desnudar su ser, su mente, y descubrir más allá de su alma antes de desnudar su cuerpo, pero esto... es tan solo un quizás.
El chico se hallaba a tan solo unos 3 metros de la banca en la que la chica había perdido el cuaderno, de repente ella apareció por una de las entradas del parque, lo que a JungKook le asustó a tal punto que su mente no pudo procesar nada, cuando reaccionó se dió cuenta de que una vez más se encontraba escondido, <<¡Cobarde!>>, se reprochó una y mil veces, <<¿Por qué eres tan cobarde>>. Observó como la chica, buscaba al rededor de la banca en la que había estado antes de salir corriendo a casa, pero para mala noticia de ella, no encontró nada allí, <<Que infortunio el mío, ¿Qué tenía en la cabeza para olvidar tener cuidado con algo tan importante>>, Pensó un tanto enfadada con ella misma, Volvió a mirar el reloj que yacía en su muñeca izquierda, ya que ésta vez le había dado un poco de pereza sacar su celular, su padre se enfadaría más si se demoraba más tiempo, pero se sentía realmente culpable al no hallar lo que buscaba, por otra parte el chico también se sentía algo culpable, si tan sólo el chico no hubiera tomado aquel cuaderno, esa chica lo hubiera recuperado al regresar en un intento de búsqueda, pero puede que otra persona lo hubiera tomado antes de que ella lograra llegar, JungKook no sabía si realmente hizo bien o hizo mal, la cuestión era que ya había actuado y no había marcha atrás.
La chica salió corriendo nuevamente, ésta vez de regreso a casa, pero... ¿Quién creería?... Si JungKook no se encargaba de acercarse a ella en esa noche, el destino tomaría el mando en el asunto... ¿Qué haría el destino?, se preguntarán... Bien les seguiré contando.
Al estar tan solo a un par de manzanas a su casa, la chica resbaló, con una capa de hielo que se había formado en la acera por la que iba corriendo, haciendo que la chica impactara fuertemente con el piso, que aunque estuviera cubierto por una gruesa capa de nieve, seguía siendo doloroso caer a la velocidad a la que iba, pero la caída no era todo, su tobillo se había torcido haciendo aun más doloroso el impacto... El chico, quien la observó caer a lo lejos, corrió hacía ella, ésta vez sin dudarlo, pero... No se percató que en su intento de ayuda dejó caer aquel preciado cuaderno que tanto le había hecho sufrir esa noche.
- ¿Te encuentras bien? - Dijo con un notable tono de preocupación, la chica se asustó un poco al escucharlo, no habían personas cercas, y el hecho de que él estuviera allí "Casualmente" le parecía un poco extraño.
- Sí, estoy bien, gracias... Solo me doblé un poco el tobillo - Dijo e intentó levantarse, pero lo único que logró fue resbalar de nuevo y lastimarse aun más.
- Súbete - Dijo JungKook, agachándose mientras le daba la espalda, anunciándole que la llevaría a caballo.
- No gracias, yo puedo irme sola - La chica había rechazado la propuesta de él, no por no quererla sino por temor, realmente era extraño que apareciera de la nada y tuviese ese repentino deseo de ayudarla.
- Si lo intentas te lastimarás más el tobillo, te llevaré a casa, los hospitales están un poco lejos, así que en tu casa podrían llevarte con mayor rapidez a uno - La mano de ella rozó delicadamente la espalda del chico, quien se estremeció inmediatamente, aun con la tela de su camisa que le impedía sentir completamente el tacto de la chica, sintió como el lugar que ella tocaba, se volvía cálido de repente, sin importar que estaban en medio de una nevada. Al terminar de acomodarla en su espalda se levantó sin ningún problema, la chica le hizo poco peso, de hecho él imaginaba que sería más pesada.
Caminó durante varios minutos, sin darse cuenta la chica se había quedado dormida en su espalda, en silencio y secretamente para ella, la espalda del chico, era más cómoda de lo que pensaba, y le gustaba tanto estar allí que hasta le daba miedo, involuntariamente se aferró más a la espalda de él, a lo que éste respondió plasmando una tierna sonrisa en su rostro, <<Desearía que su casa estuviera más lejos>>, Pensó JungKook, estaba disfrutando el tenerla tan cerca, el aroma de la chica era tan fresco, y su tacto tan cálido, en serio era única para él, ella lo hacía tener un sentimiento especial, un sentimiento que nunca olvidaría, un sentimiento que guardaría para siempre, aunque... Las palabras "para siempre" sean relativas en cada persona.
Llegaron, finalmente llegaron a la casa de la chica, él la removió delicadamente para no dejarla caer, como consecuencia de que despertara, y bajara un poco apenada de la espalda que tanto había disfrutado, se apoyó en el marco de la puerta y tocó el timbre el cual tenía una suave melodía de un villancico debido a la época.
- Gracias por ayudarme - El padre de aquella chica salió, observando primero a su hija y luego al joven, el cual inmediatamente hizo una reverencia, y comenzó a explicar la situación por la que había pasado su hija, omitiendo claramente el hecho de que la perseguía desde hace un par de horas.
- Princesa te he dicho que tengas cuidado, iré por el auto - Miró al chico - Muchas gracias... - Pausó esperando su presentación.
- JungKook... Jeon JungKook - Estiró su mano presentándose, Sonrió mentalmente, quería conocer a la chica y terminó por conocer también a su padre, El cual sin esperar más salió en busca de su auto.
- JungKook - Llamó la chica con su suave voz - Tengo una pregunta - El joven sonrió como respuesta de que podía hacerla - ¿Cómo sabes mi dirección si yo no te la he dicho? - Su sonrisa se borró al escuchar lo que dijo la chica, justo en ese momento su mente quedó completamente en blanco, no podía moverse, ni decir nada, <<¿Ahora que hago?>>, fué lo único que pensó...
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Y AHORA QUE HARÁ KOOKIE, POBRE, LO ACORRALÓ CON ESA PREGUNTA, TENGO CURIOSIDAD POR SABER QUE VA A INVENTAR, USTEDES NO??!!
SIN MÁS QUE DECIRLES L@S SARANGHAEO Y NOS LEEMOS PRONTO :-) =-O
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AMOR VERDADERO EN UN MUNDO MECÁNICO - JUNGKOOK Y TÚ
FanfictionCreemos que la vida es monótona, que todo va a ser siempre igual, que nunca vamos a salir de nuestra zona de confort, pero éste no es el caso, JungKook, un chico de 20 años de edad, cree que todos los días van a ser iguales, que nada va a cambiar en...