C A P I T U L O 4

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EDITADO

CAPITULO 4:

Dani me tendió la mano haciendo hincapié de que le siguiera, yo la acepté, al fin y al cabo es mi amigo, no pasa nada porque tengamos gestos amistosos.

Pasamos por el comedor de la casa, era la única entrada hacía el jardín exterior, como me lo temía había poca gente, y un chico que se encontraba allí se acercó a nosotros.

-Hey Dani, te vienes ya o que. Dile a tu amiguita que se venga también.- Ese chico recorría con su mirada cada centímetro de mi cuerpo. Además había sonado borde y me ha tratado con desprecio.

-Oye de amiguita nada, tengo nombre.

-Anda la fierecilla quiere pelea, me gustan las mujeres con carácter.

No pude evitar ver como al finalizar esa frase se relamía los labios.

-Logan, déjala en paz, ¿No ves que no quiere hablar contigo?

-Ahora que eres ¿Su padre?, venga Dani ella ya es mayorcita para decidir. Si me dice que quiere que me aparte de su lado lo haré ¿Qué dices nena?

-Para empezar, no soy tu "Nena", y quiero que te apartes de mi vista ahora mismo.

-Como quieras princesa.

Dicho esto él se fue y al fin pude respirar un poco.

-Ale, lo siento. Logan a veces puede ser muy...persuasivo, y más todavía cuando bebe. Pero te aseguro que es buen chico. Solo que se comporta así pues porque... En realidad no se la razón.

-No pasa nada Dani, no hace falta que le excuses, si él quiere disculparse por su comportamiento aquí estaré.

-¿Vienes con nosotros?, vamos a estar al lado de la piscina jugando a Yo Nunca.

-No muchas gracias. Ahora dentro de un rato voy

-Dentro de un rato vendrán mis amigos. ¿Podrías abrirlos la puerta?

Asentí con una pequeña sonrisa en mi cara.

Me dirigí al interior de la casa, y me senté en el mullido sofá con incontables cojines encima de él.

Cuando el sonido del timbre, me sacó de mi tranquilidad, juraría que casi me duermo.

Ding Dong

-¡Voy!

Ding Dong, DiiingDonnng

-¡¡¡QUE VOY PESADOS!!!

Al abrir la puerta no podía creerme lo que veía, ahí es cuando deseaba haberme quedado dormida, o que estuviera dormida.

Me piñizqué en brazo una y otra vez sin que nadie me viera y sin surgir resultado ninguno.

-Mierda, ¿Qué hacéis aquí?

Tenía enfrente de mis narices a mi querido hermanastro y a mi asesino/agraciado vecino.

-Eso te lo tendríamos que preguntar nosotros- Saltó Brandom mientras me miraba con sus preciosos y misteriosos ojos grises

Estupendo, para una vez que me habla directamente y no deja de ser borde por un momento, por muy guapo que sea la mala educación sigue permaneciendo allí. Mi intención era contestarle con un comentario y mirada del mismo tono

-Pues, veníamos a la fiesta de nuestro amigo Dani. ¿Le conoces?

No sé por qué Dajan siempre intenta cubrir a Brandom, siempre intenta solucionar las faltas de educación provocadas por su amigo, por una parte lo entiendo, pero por otra no.

-Sí conozco a Dani, es mi mejor amigo desde la infancia. ¿Vosotros de que os conocéis?

-Dani está en el mismo equipo de futbol que nosotros, nos conocemos desde hace unos dos años.

Dajan contestó a mi pregunta, finalizando con una amable sonrisa, mientras que Brandom le miraba asqueado. De verdad que no entiendo a este muchacho.

-Nunca he ido a ver a Dani, algún día iré a verle.

-Venga, dejaos de cháchara. ¿Vienes con nosotros? O te vas a quedar aquí abriendo puertas.

-Vale, iré con vosotros.

No le contesté mal, no quiero ganarme más enemigos, pero no voy a volver a quedarme callada. Ha sido un día muy largo, no quiero pelearme con nadie.

Nos dirigimos donde estaba Dani y seguía con sus amigos, pero esta vez estaba un poco ebrio. Me senté al lado de los chicos, y me puse un poco nerviosa cuando me di cuenta de que estaba en bikini.

Me levanté para ir a por mí vestido, además empezaba a hacer frio.

-¿Dónde vas?- Dajan se dio cuenta de que me levantaba a por mí vestido

-Voy a por mí vestido, empiezo a tener frio.

De repente, y aunque yo no lo esperaba Brandom se quitó la camiseta y la tendió en mis manos.

-Toma, póntela. Sabía yo que no aguantarías un poco de viento.

-Muchas gracias, pero no voy a aceptarlo.

-No seas tonta, si no te la pones te vas a constipar.

Al final la tuve que aceptar, y no pude evitar ver su magnífico torso desnudo, parecía tallado por los úngeles, eso realmente realza su belleza.

Me puse su camiseta, la cual me llega por la mitad del muslo, no me resistí y tuve que oler esa camiseta. Efectivamente está impregnada con su olor, ese olor a ¿bosque?, no sé si se puede denominar así pero definitivamente huele genial. Parezco una psicópata oliendo camisetas ajenas. Pero esta especie de obsesión viene en mi pack.

-Bueno, ¿Empezamos ya?

Dani me sacó absorta de mi mundo, aún seguía con en cuello de la camiseta entre mis pequeñas manos, oliéndolo como si de una especie de vela aromática se tratara.

Al final, decidí jugar, aunque ese tipo de diversión no me atrae mucho.

Pusieron una botella de Vodka sobre una mesita pequeña que se encuentra en el medio del círculo. Un par de chicas se unieron a nosotros, y fueron las encargadas de repartirnos los vasos. No podía evitar ver como todos los chicos de ese círculo las dedicaban alguna que otra mirada, no podían evitar mirarlas y algún que otro soltó un silbido cuando a una de ellas se le calló un vaso.

Me dan ganas de levantarme he irme de allí, no soporto esos comportamientos. Pero está siendo un día muy duro. Primero mi hermanastro, luego el idiota de mi vecino, ahora mi mejor amigo emborrachándose. No puedo pelear más hoy, o no por el momento. Estoy hasta y quiero que esto se acabe ya, no soportaría otra sorpresa más por hoy. Empiezo con buen pié el verano.

-Empiezo yo.- Soltó Dani- Yo nunca le he quitado dinero a mis padres.

Todos empezaron a reírse por la estúpida pregunta, y acto seguido dimos un trago al vaso. Notaba como el Vodka pasaba por mi garganta a la velocidad de un rallo, y eso no me gustaba. Me había tomado algún chupito alguna vez, pero al no gustarme no volví a hacerlo. Hasta el día de hoy.

-Anda mira, pero si la princesita bebe y hace cosas que no debe.

No sabía de dónde provenía esa voz ni quien dijo esas palabras, pero me di la vuelta y Logan estaba detrás de mí.

-Que haces tú aquí, ¿no te dije que no quería verte?

-Ya lo sé nena, pero es que estamos en una fiesta, es imposible que no nos veamos.

-Ya te he dicho que no me llames nena. ¿Quién te crees para llamarme así?

-Lo sé bombón de licor, nadie me ha dado permiso, pero me gusta lo prohibido.

-Vete a dar una vuelta y déjala en paz Logan.

Dani se levantó y se puso a mi lado, evitando así que siguiéramos peleando.

-Princesa no te olvides, nadie se resiste a mis encantos.

Dicho esto Logan se fue, dejándome así más tranquila

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