POV. SOFIA
Estaba en mi habitación de hotel, como es común se haría una cena con el cast para poder darle la bienvenida a los nuevos miembros aunque este contaba en su mayoría de niños, alguien tocó a mi puerta, abrí y pude ver al chico pecoso y de cabello rizado, -holaaaaa sof- me dijo al verme detrás de la puerta, -¡hola!, otra vez- reí ante el saludo, -¿estás lista?, porque vas a ir- me dijo en tono de orden, -claro que iré, vamos- tome mi abrigo y salí de la habitación.Bajamos al restaurante del hotel pues Kenny había decidido no salir, eramos muchos como para ser vistos y provocar una multitud, estaban China, Mitchell, Brenna, los pequeños nuevos integrantes, Sarah, Cameron, Booboo y yo, ella no estaba ahí y era algo que agradecía, vernos nos ponía en situaciones incómodas o al menos a mi. -miren quien viene- gritó Mitchell proporcionando aplausos falsos, -oh no es posible, es sofia carson- dijo booboo finjiendo emoción y yo reí ante aquel acto de bobería de mis compañeros de cast, la cena iniciaba y al menos ellos tenían otras preguntas para mi que no tratasen de indagar sobre mi fallida vida amorosa, al menos mi vida laboral era algo que me enorgullecía, había florecido. -y dinos, con que una "liar" eh, ¿cómo fue que eso sucedió?- Brenna inició, y yo calle mi platica con Boo para mirarla, -claro, hice una audición para eso, después Marlene me llamó para una participación en ptra de sus series, los fans quedaron facinados y bueno, se fue dando y la idea del spin-off ya estaba, así que fue elegida- expliqué mientras daba un sorbo a mi copa de vino. -wow, es algo grande Sof, esa serie es bastante impactante- dijo Sarah, -claro, la original lo fue, esperamos una respuesta hacía este proyecto pero encamina a que será al menos igual de exitosa- le explicaba, de pronto Dove llegaba al restaurante a unirse a nosotros, ella me miro y yo le sonreí, a fin de cuentas yo no le guardaba rencor alguno.
-hola principessa- me dijo la rubia tomando mis hombros por detras mío y sobando en forma de masaje, me sentí incómoda entonces, ¿por qué hacía eso?, kenny lo notó y me salvó de aquello. -Sofia, ven hacía acá, necesitamos aclarar algunos detalles con las fechas- supe que me salvaba porque los detalles de las fechas ya lo habíamos arreglado, en la serie ya habíamos terminado el periodo de grabación de algunas cosas, así que no había cuidado. -claro, voy- dije pero sus manos me impedían levantarme, -¿me permites?- le dije a Dove, ella hizo una mueca y quito sus manos, ya no sentía nada ante su tacto, ya todo había quedado olvidado.
Hablaba con Kenny sobre cualquier cosa, el estaba entusiasmado de ver mi carrera progresar, aunque lo que a el le interesaba era mi carrera musical, -¿ya tienes tu próximo sencillo?- me dijo y justo cuando iba a responder aquella rubia que había dejado en el otro extremo del lugar se acercó, -sof, ¿podemos hablar?- dijo como si nada, mi cuerpo se tensó, no podía y no quería hablarle todavía. -no, tengo que irme a memorizar unas líneas para Evie, aún me resulta difícil una escena, con su permiso- iba a salir de aquel lugar pero alguien tomo mi muñeca. -¿a donde vas?- me dijo Cameron con extrañeza, voltee a mirarlo, -a mi habitación ya estoy algo cansada- le dije y el accedió y me llevo hasta allá, a el no le gustaba dejarme sola, a fin de cuentas podíamos hablar de todo, es mi mejor amigo, es como mi hermano menor y ahora Pau no había venido conmigo, tenía diversos pendientes y se quedo en casa en L.A
Llegue a mi habitación ya me había relajado, había estado en la tina algunas horas y gozaba aquello en realidad, había colocado una pijama de seda sobre mi cuerpo, obviamente ya no llevaba sostén, no sería necesario ya había pasado más de media noche y partiríamos en dos días así que no tenía preocupación alguna, de pronto alguien toco mi puerta, me acerqué a la mirilla de la puerta y pude verla, ahí, parada como si nada frente a mi puerta y yo ahí atrás con una pijama de seda que no dejaba nada a la imaginación, sin duda el querer ignorarla y hacerla de lado no funcionaría, ahora ella me buscaba, pero ahora ya no tenía sentido, debía hacerle entender que nuestra oportunidad había pasado, que cuando debió elegir fue hace dos años, no ahora.