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"Él calor de tu cuerpo es lo único que me ha mantenido vivo"

Lynna corrió por los pasillos de su casa con un mantel azul, Christopher llegaría dentro de poco y quería que su bienvenida sea perfecta, Quizás el había crecido y cambiado mucho, aun así para ella seguía siendo su hermanito y quería ver que tan guapo se había puesto, las fotos y vídeo llamadas no eran suficiente que tenerlo de frente viendo cada detalle de su anatomía, además sabía que habían cosas que no le contaba por no tenerla de frente y era muy obvio que quería hacerlo.

Lynna termino de colocar él mantel, sonrió todo estaba quedando hermoso. Sintió unas manos posarse en su cintura atrayendola al pecho trabajado de su esposo su piel cálida rozando la piel de su mejilla dejando un suave beso sobre esta.

—No deberías esforzarte mucho— murmuró Richard.

Lynna rió rodando los ojos

—Es mi hermanito, no lo he visto en 10 años, mi madre lo aparto de mi, es obvio que tengo que esforzarme— se giro encarándolo.

—No tuviste la culpa de eso— dijo.

Lynna se alejó, ahora estaba molesta sabia que no tenía la culpa, pero también pudo hacer algo todo este tiempo y no lo hizo, por lo tanto le había fallado a Christopher.

—Ly...— él timbre de la casa sonó interrumpiéndolo.

La ojiazul corrió a la puerta, abriéndola de prisa con una sonrisa enorme.

—¡Hola! ¿Lynna?— susurró el chico detrás de la puerta, con su expresión tímida viendo todo excepto los ojos azulados de la mujer frente a él.

—Chris..— brazos apretándolo con fuerza, abrazándolo con demasiado afecto, lágrimas de alegría mojando la camisa de seda que traía puesta, su hermanito había vuelto.

Él abrazo duro poco más de dos minutos hasta que el carraspeo de Richard los obligo a separarse, extendiendo una sonrisa cautivadora de hombre perfecto.

—Soy él esposo de tu hermana, Richard, sientete como en tu casa, Christopher— entrelazó su mano con la del menor sonriendo.

Christopher le devolvió la sonrisa abochornado, algo en Richard lo intimido, quizás eran sus ojos cafés profundos o su sonrisa confiada, quizás la manera en la que estaba parado como toda una figura que exigía respeto.

—Debes tener hambre— intervino su hermana.

Christopher asintió sonriendo.

—¿Aun sigues siendo tímido?— preguntó su hermana con una sonrisa.

—Si, bueno.. Yo..—

—¡Nunca cambiaras, Chris!— lo abrazo pellizcando sus mejillas.

Christopher no respondió sólo se sonrojó mas, observó a Richard y lo que vio en su mirada no consiguió descifrar que era, pero sin duda lo ponía nervioso.

[•••]

El almuerzo había estado delicioso, Lynna había preparado unas hamburguesas con papas y un pastel de chocolate y al igual que cuando eran niños Lynna colocó fresas en forma de animales en su rebanada, lo que hizo que se sonroje.

—Ya no me gustan las fresas en forma de animales Lynna, ya no soy un niño— bufo.

—Christopher, siempre seras mi hermanito, no importa cuánto crezcas— beso sus mejillas eufórica.

Christopher intento apartarla, la risa ronca de Richard lo puso nervioso por lo que dejo de luchar, dejando que su hermana continúe dejando besos estruendosos hasta que deseé apartarse.

—¡Ya tengo 18, no soy un bebé!— dijo una vez que su hermana se apartó.

—Eso ya lo se, pero pienso recuperar todo él tiempo que no estuviste conmigo — hizo un puchero que hizo sonreír al ojimarron, su hermana seguía siendo la misma de hace diez años.

[•••]

Christopher había acabado de guardar sus cosas en él ropero que le dio su hermana, la habitación era grande, tenia una cama cómoda, una mesa de noche con una lampara "por si se asusta en las noches" y con ese comentario su hermana logró avergonzarlo una vez mas, todo estaba bien él único problema es que no tenia un baño dentro y tenía que salir de su habitación en las mañanas para lavar su rostro y no quería encontrarse con Richard cuando su cara era un asco, ¿Por qué estaba pensando en eso? A él que le importaba Richard, Christopher se dijo que sólo era el cansancio del largo viaje que tuvo.

Salio de su habitación temporal después de unas horas, su hermana le había dicho que quería mostrarle algunas fotos, pero que primero él debía descansar de su viaje. Bajo las escaleras en silencio moviendo su cabeza de un lado a otro preparándose para los comentarios bochornosos de su hermana, su rostro se encendió al ver a Richard besando a su hermana con pasión, rápidamente retrocedió escondiéndose un poco para no ser visto mientras los observa y ¿Por qué los esta observando?. Richard abre los ojos en medio del beso mirando a Christopher mientras acaricia la cintura de Lynna levantando un poco su camisa, algo brillo en los ojos de Richard, Christopher succiona su labio girándose para marcharse avergonzado hasta su habitación.

Richard lo había descubierto.

Richard se aparta suavemente sonriendo satisfecho.

—Chris puede bajar— susurró Lynna.

—Tienes razón mi amor— dijo removiendo algunos cabellos del hombro de Lynna, besando su hombro sintiendo como ella se estremece. Apartandolo Lynna dijo.

—Iré a ver si se durmió— dejó un ultimo beso en los labios de Richard, el asintió y la vio marcharse acomodándose la blusa y él cabello.

Lynna toco la puerta de la habitación de Christopher pero no obtuvo respuesta, él menor sentía tanta vergüenza que no tenía el valor de verla a la cara.

Lynna entro, sentándose en él borde la cama acariciado él cabello de Christopher.

—Sigues siendo terrible fingiendo— rió.

Pero Christopher no se movió sabía que solo era una trampa, lo había hecho hace tiempo cuando eran niños, Christopher estaba seguro de que era bueno fingiendo. Pasaron varios minutos y Lynna se alejó saliendo de la habitación no sin antes dejar un beso en la frente de su hermano y arroparlo bien para que no pase frío.

—Se quedó dormido— suspiro sentándose junto a Richard.

—Debe estar cansado por él viaje— dijo acariciando la pierna de su esposa y ella asintió.

—Quería mostrarle las fotos — suspiró triste.

—Quizás mañana lo hagas— se acercó a ella besando su mejilla —Ahora podrías mostrarme a mi otras fotos— acarició su cintura a lo que ella rió.

Christopher podía escuchar con claridad todo lo que sucedía en la sala y término calentándose sin poder controlarlo.

Fetish »Ristopher« || TERMINADA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora