Fetish »Ristopher« || TERMINADA.

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Lynna contaba su día en él trabajo mostrándose emocionada por la bella pareja que ese día había comprado él mismo ramo de flores por su aniversario dando como símbolo él día que se conocieron.

—Es muy lindo verdad Richard— dijo con voz cantarina.

—Si, muy hermoso mi amor— dijo él rizado besando la mejilla de su esposa, al alejarse observo a Christopher con una sonrisa socarrona, como si intentase insinuarle algo.

Christopher se mostró desinteresado y se concentro en comer sus verduras, Richard  junto sus cejas levemente.

Richard levantó una de sus piernas acariciando con la punta de sus zapatos los muslos del menor, este se tensó y un leve sonrojo apareció en sus mejillas, si Richard continuaba avanzando de seguro tendría una erección.

—¿Puedo ir a mi habitación Lynna?— preguntó Christopher apartando su plato.

Su hermana asintió sin entender la razón de su comportamiento pero decidió no preguntar para no incomodarlo.

—¿Te sientes bien Chris?— preguntó con fingida preocupación.

Christopher apretó sus puños y dijo: —Si Richard, estoy de maravilla— hablo con sarcasmo.

—Si te sientes mal solo avisame, yo podría ayudarte en lo que sea— Christopher no tenía que verlo para saber que estaba sonriendo burlesco por el doble sentido de sus palabras.

—Te avisaré, aunque no creo que sea así porque como ya te dije estoy de maravilla—

Se marchó para no armar alguna escena frente a su hermana.

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Su mano subía y baja alrededor de su pene erecto, pequeñas gotas de sudor estaban sobre su frente y de sus labios pequeños gimoteos salían, él agarre en su pene fue presionado con mas fuerza cuando la imagen de Richard en la piscina llego a su mente, con su sonrisa cínica y sus ojos llenos de deseó, con sus fuertes brazos que lo sujetaron aquella vez, llevo dos de sus dedos de su mano libre a su boca para chuparlos; necesitaba sentir aquella sensación de opresión y electricidad en su interior, suplicaba por tocar aquel punto en su interior que lo llevaban a la gloria, dirigió sus dedos insalivados a su entrada pero no podía llegar a meter ni la mitad de su dedo índice cuando ya se sentía incómodo.

Se giro quedando sobre sus rodillas, con su pecho sobre las sabanas, una mano se dirigió a su miembro y la otra a su entrada esta vez entrando con mas facilidad, empujó sus dedos con fuerza jadeando al sentir ese ardor y pequeño cosquilleo en su vientre, empujó una vez mas llegando un poco mas profundo, sintió como su interior se expandía un poco mas cada vez, su mano sobre su pene siguió con su sube y baja, paso un dedo sobre la punta esparciendo él pre-semen.

—¡Mas profundo Richard!— lloriqueo despacio con miedo de ser escuchado por su hermana.

Christopher rozo su próstata pero sus dedos no conseguían darle él alivio que necesitaba, lo necesita a él, a su pene penetrándole con fuerza haciendo que su estómago se contraiga y entonces sucedió, se vino en sus sabanas con un gemido ahogado.

Maldito Richard con su solo pensar había conseguido que su cuerpo se alterara, pudo escuchar un ligero ruido como si su puerta fuese cerrada, quizás solo había sido él viento. Acomodo sus prendas y retiro las sabanas para colocar unas limpia mañana iría a lavar esas que en sucio.

[•••] 

En la cocina estaba Richard comiendo su desayuno, giro sus ojos y se dispuso a comer la avena que le había preparado su hermana.

—Asi que.. Te gusta tocarte pensando en mi— sonrió.

A Christopher se le congelo la sangre y se atoro con la avena en su garganta impidiéndole respirar.

—¡¿De qué mierda estas hablando?!— grito.

—¿No es eso lo que hacías anoche en tu habitación? Imaginar que te follo mientras tienes los dedos en tu culo y tu mano sobre tu polla— Relamio sus labios sonriendole.

—No me quedaré a escuchar tus estupideces — dijo y se marcho, nunca había sentido tanta vergüenza.