"Mi Perdición"

Capitulo 3.

Narra Holly:

-Amiga luces increíble.- Me dijo Megan en cuanto llegue a la fiesta.

-Gracias amiga, tu igual.- Le sonreí. -¿Dónde esta Emma?- Pregunte al no verla por ninguna parte.

-Ya la conoces, debe estarse ligando a algún chico en este momento.- Rio Megan.

-Tienes razón.- Reí.

Mire a mi alrededor, esta fiesta era enorme, la música retumbaba en mis oídos, solo habían estudiantes de la preparatoria ya que era una playa privada. Todos bailaban sin parar, sin duda sería una noche divertida.

-Aquí está tu bebida princesa.- Susurro Drew en mi oído sorprendiéndome un poco, me gire para mirarlo y sonreí.

-Gracias.- Tome la bebida que tenía en su mano y le di un sorbo, rápidamente sentí como me quemaba la garganta. – ¿Drew esto tiene alcohol?- Pregunte con asco, nunca me había gustado el alcohol, era extraño pero yo no encontraba algo agradable en esa bebida.

-Solo un poquito bebe, es para que te diviertas.- Me dijo tranquilamente.

-Puedo divertirme perfectamente sin necesidad de alcohol, además tu sabes que yo lo odio.- Le devolví la bebida un poco molesta. El sabía que yo odiaba eso y aun así me lo dio.

-Perdón mi amor, no volverá a pasar.- Se disculpó.

-Eso espero.- Lo mire con mala cara. Busque a Megan y la vi bailando en medio de la pista.

-¿Quieres bailar?- Me pregunto Drew.

Dude unos segundos en contestarle, pero finalmente accedí.

Nos dirigimos a la pista de baile, y comenzamos a bailar.

Drew se apegaba cada vez más a mí, cosa que no me molestaba era mi novio después de todo. Podía hacerlo.

De la nada Emma apareció a mi lado riendo y comenzamos a bailar juntas.

Emma estaba tan loca que hacía unos pasos de baile completamente raros haciéndome reír sin parar.

El novio de Emma apareció y comenzamos a bailar los cuatro juntos. Era un momento de verdad divertido, bailábamos y reíamos sin parar.

Drew me pego a su cuerpo y comenzamos a bailar un poco más sensual podría decirse. Drew sabía que si no estuviéramos bailando jamás lo dejaría tocarme así, creo que aprovecho la oportunidad.

Sentía una mirada puesta en mí, no sabía de donde venía pero la sentía.

No le di importancia, había demasiada gente en esa fiesta, seguramente estoy alucinando.

Drew me giro para quedar de frente y me tomo de la cintura, yo puse mis brazos en su cuello, y juntamos nuestros labios en un apasionado beso.

El beso era feroz, exigente, nada que ver con los que siempre me daba.

Sus labios sabían a alcohol, seguramente ya se le subieron los tragos.

Puso una de sus manos en mi trasero y lo apretó.

-Basta Drew, no te pases.- Susurre separándome un poco de él.

-Necesito sentirte bebe.- Dijo el volviendo a besarme con desesperación.

El beso era demasiado fuerte, no podía seguirlo, Drew apretaba tanto sus labios con los míos, que comenzó a lastimarme.

Trate de separarme pero no lo lograba.

Odiaba las muestras de amor en público, pero en ese momento nadie nos veía, todos estaba bailando locamente, y otros estaban haciendo lo mismo que nosotros.