Me levante de golpe. Me había parecido oír la voz de mi madre, mire hacia todos los lados pero solo estaba en mi cuarto, ni rastro de mi madre, pero estaba segura que había oído su voz y la de otra persona.
Una gran explosión me hizo saltar de la cama y bajar rapidamnte las escaleras para ver que pasaba. Al asomarme al balcón casi me caigo de espaldas, esos dos...
-Que has dicho llamitas!?
-Ya veras princesa de hielo!
-Repite eso si te atreves carbón!
-Que has dicho cubito de hielo!
Derek y Sthepan estaban peleando de buena mañana. Voy a matarlos como no se callen.
-VAIS A PARAR SI?! -dijo Simon dándoles un golpe en la cabeza y dejándolos KO.
Intente no reírme, eran como Natsu, Gray y Erza. No podía esperar mas a verlos.
-El ultimo y descansamos? Aun no entiendo como puedes recuperarte de 20 años sin utilizar magia en dos días -dijo Layla.
-Claro. Pero el secreto en un entrenamiento es desearlo, cuando deseas algo siempre lo consigues -le dije con una sonrisa.
Las dos estábamos sentadas con las piernas cruzadas y meditando, eso fortalecía la magia y ella quiso probarlo. En dos días ya había mejorado mucho mas que lo suficiente, había aprendido algunos trucos mas, y en el combate cuerpo a cuerpo lo había mejorado, después de 20 años sin luchar eso era lo que mas se me había oxidado, la puntería seguía teniéndola perfecta, y aprendí a empuñar una espada y a defenderme con ella.
Teníamos previsto volver esta tarde, y este era el ultimo entrenamiento. Layla estaba intentando fortalecer su magia pero no lo conseguía, tanto ella como su hermano tenían muy poco magia, y eso era estraño teniendo en cuanta quien era su padre. Lo mismo le pasaba a Diego.
-Vengo, inténtalo otra vez, no pienses es nada, deja la mente en blanco.
Entonces, un aura roja rodeo de repente a Layla, el aura creció superapido y era tan brillante que tuve que taparme los ojos. Esa era la fuerza de Natsu y Lucy mezcladas. Todos al ver la luz salieron del balcón para ver que pasaba. Y se quedaron pasmados al ver que era Layla la que había producido tal monstruosa cantidad de magia.Poco a poco el aura fue bajando y Layla se desmayo.
Había llegado la hora. Me despedí de mis hermanos, ellos lloraban y los niños también pero sin entender. Supongo que para ellos solo habría sido un bonito sueño, mientras que mis hermanos sufrirían.
Cogí mis llaves y la miré, hacia tanto tiempo que nos las tocaba, rebusque entre todas la que nos llevaría a Fairy Tail. La encontré, era dorada, con el signo de Fairy Tail. La cogí cuidadosamente, como si se fuera a romper en cualquier momento.
La levante y suspire, cuanto tiempo hacia que no pronunciaba estas palabras?
-Yo te abro! Puerta hacia Fairy Tail! Llévame hasta allí!
Todo brillo, tuve que cerrar los ojos para no hacerme daño. Cuando los abrí nos encontrábamos delante del gremio, sonreí, y no dude en entrar rápidamente.
Abrí las puertas con una patada, como hacia Natsu normalmente y sonreí.
-Hey, alguien me olvido? -sonreí, no podía estar mas contenta y feliz.
Todas las miradas se posaron sobre mi, algunos sorprendidos, otros con los ojos llorosos, y otros con la boca abierta.
-Que? Tengo algo en la cara? -pregunte preocupada.
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Mi vida en Fairy Tail
FanfictionSiempre he soñado en ir a Fairy Tail, pero nunca pense que podria ser posible, en forma de espiritu estelar.