Hoy, como cada día, estás acá,
conmigo...
No es cierto que te fuiste
Estás en un viaje
del que regresas a diario
Cuando el cielo se vuelve negro,
cuando la tormenta arrecia,
siempre aparece ese trocito
de cielo azul celeste
con el que se confunden tus ojos
pero destaca tu sonrisa...
Entonces sé que todo está bien
Y vuelvo a reír de mis angustias,
y vuelvo a mofarme de tus equívocos,
y vuelvo a sentir tus besos babosos,
y vuelvo a gozar de tus abrazos apretados,
esos que nos hacen quejar
Y en mis hermanos están tus gestos,
y están tus manos...
Y tu sonrisa, esa que tanto amo,
esa es muy mía
y es para mí, tu mejor regalo...