Hoy amaneció sereno...
Miré por la ventana
y los árboles se mecían
con tanta fuerza
que semejaban monstruos
de enormes brazos
queriendo arrasar con todo a su paso...
Las hojas desprendidas
danzaban un ritmo frenético
casi rozando la locura desmedida...
Las nubes negras
advertían el peligro
de aquél que desafiara al tiempo...
Las flores del jardín
se dispersaban atemorizadas
buscando un refugio que no encontraban...
Los pájaros de siempre,
con sus trinos y aleteos,
no estaban...
El ulular del viento
sonaba agudo en mis oídos...
Todo mostraba miedo,
desolación, tristeza,
silencio, soledad,
abandono...
Sólo mi alma estaba serena
en medio de tanto caos...
Y de pronto la vi...
Era la flor más hermosa jamás vista
y se mantenía erguida en su fuerte tallo,
orgullosa de su fuerza y de su brillo...
Respiré aliviada...
También ella se sentía en calma
a pesar del huracán que amenazaba
destruir todo lo logrado...
Así como ella,
mi alma está serena...
El huracán está afuera
mas yo...
yo me siento en calma...
