Capitulo 8

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-Musa.

De mala gana miró hacia la entrada de su habitación. Cansada de que interrumpan sus momentos de tristeza.

-¿Que pasa?

Respondió irritada mirando a Stella.

-¿Quieres compañía?

-Así estoy bien. Gracias.

Se dio la vuelta en la cama para darle la espalda a la rubia en forma se decirle "lárgate".

Escuchó que la puerta se había cerrado dejándola sola, o eso creyó.

Subió el volumen a sus auriculares y cerró los ojos. Al segundo sintió que alguien se sentó cerca de sus pies acariciando su muslo.

Musa abrió los ojos, esa no era la mano delicada de Stella. Esta mano era más grande.

-¡Riven!

Sin pensarlo dos veces lo abrazó.

En ese instante Riven agradeció seguir los consejos de Dalila. Valió la pena rezar por suerte en el camino y que su novia no lo mandara al carajo.

-Musa. Necesito que me digas que está pasando.

Le dijo luego de soltarla.

-Riv, es complicado y no quiero que te vayas.

-¿Que? Musa jamás me iré, ¿que pasa?

-No lo entenderías, de verdad. Lo único que quiero ahora es que te quedes aquí conmigo y cuando este lista te lo diré. Lo prometo.

-¿Que es tan grave? ¿Te molestó que te haya mandando a comprar un test?

-Riven, en serio- lo acostó junto a ella en la cama y se apoyó en su pecho en un abrazo. -Lo único que quería era estar sola, pero nada es mejor que estar aquí contigo.

Por los primeros diez minutos el hombre se sintió incómodo. Como que había perdido una guerra. Tal vez su novia estaba embarazada pero aún no quería decirle. Tal vez no lo estaba y era algo mas. Luego entendió que el lugar donde el quería estar era ahi, con ella. Cerró sus ojos para abrazarla un poco mas fuerte y aprovechar todo el momento. Nuevamente agradecía el consejo de Dalila.


A unos kilómetros. Futuros esposos abrieron investigación al "caso Dalila", como habían acordado que era el código.

Con café en la mesa del restaurante comenzaron a anotar.

-La historia en resumen dice que Dalila comenzó a sufrir de la violencia de Max cuando llevaban un año en su relación. Ella había quedado embarazada y en un momento de violencia extrema perdió su bebé. La historia de desenlaza en la denuncia de parte de su hermana quien metió a Max tras las rejas por un tiempo. Lamentablemente gracias a la herencia de uno de sus abuelos su familia decidió sacarlo de la carcelaria dejándolo completamente libre, sin pedido de espacio hacia Dalila. Esto es tan injusto.

-¿De donde sacaste toda esa información?- interrogó Helia mirando con asombro la fotocopia.

-Es un informe venido del lugar donde estuvo preso. La otra parte es la historia que contó Dalila.

-Wow. No sabia que perdió un embarazo. Debe ser terrible.

-Es por eso que debe alejarse de ese sujeto- respondió sacando otra fotocopia entregándosela a su pareja. -Luego de un tiempo de todo esto Max vio la oportunidad de acercarse otra vez rescatándola del secuestro de Irina. Cuando vio que nosotros también fuimos supuso que algunos ya sabían su historia y se puso un nombre falso. Cuando "Paul" vuelve a Alfea con nosotros en compañía de Dalila, que estaba inconsciente, nadie sabía quien realmente era. Todo se vuelve un lío cuando Dalila lo reconoce y quiere aplastarlo.

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