Porque quiero que esto acabe
Rong
Justo después de la clase de música tenía que salir casi corriendo a mi siguiente clase. Pero gracias a Mia, que me siguió como si fuera mi sombra, tuve que huir y no asistir en todo ese día. No entendía tanta insistencia con Yoongi como para enviarme a la chica que arruinó todo, supuestamente para darme explicaciones de algo que ya no me importaba más. ¿Por qué le costaba tanto dejarme en paz?
La próxima vez que lo viera le diría sus verdades en la cara.
—¿Rong, me escuchaste? —siento que murmura una voz cerca de mi oído, sacándome de mis pensamientos.
Parpadeo hasta enfocar la vista en el masivo cuerpo de Lee, mi jefe.
—¿Qué? ¿Qué pasó? —pregunto de mala gana.
Lee suspira mientras saca un pañuelo de papel de su bolsillo derecho del pantalón y se lo pasa repetidamente por la frente que ahora está cubierta en sudor.
—Dije que hoy vinieron los nuevos uniformes que pedí —señala la caja ubicada cerca de la salida de emergencia—, cuando venga _________ dile que te cubra mientras tú los repartes.
Mi ceño comienza a fruncirse de inmediato.
—¿Por qué insistes en que usemos esas cosas? Te juro que si es otro de pirata sexy te voy a...
—No, no, no —dice él al instante, elevando sus manos con rapidez—. No es eso, lo prometo. Este uniforme es sencillo y tiene los colores oficiales del restaurante.
—¿El restaurante tiene colores oficiales?
—Sí, el edificio está pintado en verde, rojo y amarillo. El uniforme lleva los mismos colores. Es decente, lo prometo.
¿Decente? Lee no tiene ni una pizca de decencia en el cuerpo; lujuria sí tiene de sobra, morbo, glotonería, pereza, avaricia, envidia... pero decencia no.
—¿Y a qué se debe ese cambio? —pregunto.
—Bueno...
—A mí no me vayas a mentir que no soy como los demás.
—Está bien. El gran jefe dará una visita la otra semana y tenemos que parecer un restaurante de calidad; él nunca aprobaría los uniformes actuales.
Eso lo explica todo.
Estoy a punto de dar mi comentario al respecto, pero una figura masculina se atraviesa entre los dos. Su brazo cae en mi hombro y se acomoda tranquilamente.
—¿Acaso escuché algo acerca de uniformes? —pregunta Jungkook mientras asiente positivamente hacia Lee.
—¿Qué haces aquí? —lo regaño, quitando su mano de mi hombro—. No me toques a menos que quieras perder ese brazo; y esta área está restringida, es solo para personal autorizado.
—Déjalo —dice Lee encogiéndose de hombros—, es casi el dueño del lugar, sale con la hija del jefe así que viene siendo lo mismo.
Ruedo mis ojos mientras suspiro para encontrar paciencia.
—Estamos discutiendo el tema de los uniformes de trabajo —comenta Lee, señalando a la caja aun bloqueando la puerta de salida de emergencia—. ¿Te gustaría echarles un vistazo y darnos tu opinión?
Jungkook se encoge de hombros pero de igual forma corre para verlos.
Noto que abre la caja con cuidado, y pronto está sacando el primer uniforme que, al parecer, consiste en una camisa de botones y una falda de color sólido en verde.