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– Mina tu y yo no somos nada – replicó el joven tailandés a la jovencita que en ese momento que ya se encontraba irritada y enfadada.
Después de encontrarse a Mina no espero alguna otra palabra proveniente de la boca de ella, la tomó del brazo para llevarla lejos de su casa, para poder hablar tranquilamente sin algún imprevisto de que alguno de sus padres saliera obteniendo una "bella vista" al ver a su hijo peleando con una japonesa.
Al llegar un par de cuadras decidió que era momento de soltarla obteniendo un gran reclamó de ella por lastimar su muñeca callando su quejido con sus palabras.
Ella al escucharlas no hizo más que soltar un grito de sufrimiento más que fingido. El no pudo aguantar el no hacer una mueca por semejante sonido .
Al terminar su mini gran drama junto con lamentaciones, insultos y una que otra lágrima de cocodrilo se calmó de fingir.
– Chittaphon has hecho mal en no estar conmigo – manifestó con total decisión – volverás a mi.
Fueron sus últimas palabras que escucho el tailandés porque no quería escuchar su palabrería amenazante, en vez de dar algo como miedo, no da ni risa más bien le daba pena ajena por ella, ¿Como quería reclamar algo que nunca ha sido de ella?, y lo peor es que lo tomaba como un objeto. Prefiero antes que escucharla dar una vuelta sobre si mismo para comenzar a caminar en la misma dirección por donde llegaron pero ahora hacía su casa ignorando todos los gritos chillantes de ella.
– ¿Porque se ilusionan con una sola vez que les hable?.
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– Akiko si en verdad quieres mi opinión – Yoonoh dió vuelta o lo mas bien que pudo en el lugar en donde de encontraba sentado, para poder ver mucho mejor a su mejor amiga – será mi más humilde opinión respecto a tu situación.
Ella asintió con frenesí su cabeza en señal de que quería saber, y demaciado, necesita más perspectivas de varias personas y más de una que sabe todo lo que ha pasado.
