11 de Marzo 6:34
Narra Liam.
Apenas deje que el coche de la policía en el que iba se detuviera para abrir la puerta. Salí de un salto cuando todavía no había frenado del todo y corrí hacia la casa de donde hace unos días escape, no pensé que alguna vez correría desesperadamente hacia ella.
Pero allí estaba Mia, la he abandonado en uno de los momentos mas cruciales de su vida. Estuve el camino de ida al pueblo mirando atrás por si ella también había conseguido escapar y iba detrás de nosotros, y todo el camino de vuelta a la casa mirando por la ventanilla del coche. En ninguna ocasión la vi, y hace días que tengo una sensación extraña en el pecho, como si una parte de mí se hubiera esfumado.
Abrí la puerta de entrada sin ningún cuidado, golpeándola con la pared. La casa estaba en completo silencio, baje corriendo al sótano tropezando con algunos escalones, nunca he estado en el sótano pero con las descripciones que me dio Mia no me costo encontrar la sala donde debía estar.
Bruno iba detrás mía intentando seguirme el ritmo, cuando entre en la habitación me pare en seco y él choco con mi espalda.
No podia creerlo, ahora entendía que parte de mí se había ido, que parte de mí estaba rota. Verla ahí tumbada con los ojos cerrados, pálido como el marfil, rodeada de sangre ya seca.
Me arrodille delante de la cama, las lagrimas empezaron a rodar por mis mejillas. El hombre estaba sentado en una silla al lado de la cama con la cabeza agachada.
-Lo siento.-dijo.
-¡¿Qué lo sientes?! ¡Todo esto es por culpa de tus malditos experimentos inútiles! ¡Los hombres lobo no existen! ¡Estas loco! ¡Tú la has matado!
En el suelo se encontraban dos criaturas, eran medio humanas medio lobos, las aparte lejos de la cama, lejos de Mia. Habrían salido de ella, pero esos no eran sus hijos. La cogí una mano y enterré la cara en ella mientras seguía llorando y se llevaban al hombre detenido, Bruno se fue para dejar que me despidiera a solas, este será el ultimo momento que tendré a solas con ella antes de que la entierren, la incineren, o a saber que otra cosa.
Esos no eran sus hijos, recuerdo que una vez me dijo que si tuviera dos mellizas humanas las llamaría Noreen y Kayla. Pero lo que estaba en el suelo ante mi no eran sus hijas y yo no quería que se les pusiera nombres a esas criaturas.
Cuando me calme un poco me atreví a mirarla, no voy a echar el típico discurso de cuanto la quería y que no voy a poder seguir viviendo sin ella. Viviré porque para ello se sacrifico, aunque no creo que lo viera como un sacrificio sino como algo que solo ella podía hacer. No voy a hablar porque no hay palabras, se ha ido y por mucho que hable a las paredes no volverá.
Baje la mirada hacia su muñeca, la que yo llevaba sosteniendo desde hace un rato. Si, aun llevaba nuestra pulsera, y yo también en la misma mano. Recuerdo que le dijo al hombre antes del día de reyes que ya se había leído todos los libros de la estantería y se aburría. El hombre dejo que lo acompañara a el pueblo a la compra mensual, el estado de Mia ya era muy avanzado por aquel el entonces, sabia que no se iba a intentar nada, que no me dejaría así como así
Compro las pulseras a juego como regalo del día de reyes." Ya se que unas pulseras no son tan útiles como un bizcocho" dijo cuando me las dio "pero quería agradecerte de alguna forma el apoyo que eres para mí".
Nunca me quitare esta pulsera, y me asegurare de que a ella tampoco se la quiten. Así sabré que una parte de mi siempre estará con ella.
Me levante, me seque la cara. Ya bajarían a buscarla, se me acababa el tiempo. La acaricie la fría cara, me incorpore y le susurre lo ultimo que tenia que decirla al oído.
-Te amo.
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Experimento X
WerewolfMia iba de camino a los Pirineos para celebrar junto con sus compañeros el viaje de fin de curso, era la ultima opotunidad de estar todos juntos. Pero de camino tienen un accidente y al despertar se encuentran en una extraña casa donde un hombre dic...